Hoy estoy aquí para escribirte un adiós.
Estoy aquí para despedirme, porque este miedo sé que tarde o temprano devorará mis entrañas para al final demostrarme que sus razones tenía y abrazar el profundo dolor que siempre queda después de que este amor me lastime.
Estoy aquí para escribirte un adiós que tus ojos nunca leerán.
Lo sé, esto es más como una despedida a una tumba vacía solo por miedo a terminar dentro de la misma en un futuro torcido por viejas heridas. Y digo vacía porque también sé, quizás experiencia de los años, que esta feliz y descuidada esperanza no desaparecerá solo por escribir este adiós.
Lo sé, está es la carta de intento de rendición de una cobarde.
2023
ESTÁS LEYENDO
Caramelos de menta
PuisiÉl tiene en sus ojos el cielo nocturno, con un millar de brillantes estrellas... pero sin luna. En su sonrisa el amanecer y en sus bolsillos caramelos de menta. Inesperadamente se coló en mi corazón; arregló algunas cosas, rompió algunas otras y al...