En ese momento la mesera llega con la comida, coloca los platos con delicadeza en su respectivo lado. Para luego volver a servirle algo de vino a Neil y finalmente se retira... Shaun mira su plato y aunque no tenía mucho apetito comenzó a comer.. era una comida a la cuál no estaba acostumbrado.. muy elegante para su gusto.. además.. pagar mucho por tan poco? pensó, miró de reojo al moreno que comía de una manera elegante mientras disfrutaba del vino en su copa. Era.. atractivo.. de tan solo pensar eso hizo que sus mejillas se tornaran de un rosa carmesí... él nunca tuvo interés nadie.. ni chicas ni chicos.. su mente ahora estaba confundida.. Neil no tardó mucho en darse cuenta de eso por lo que rompió el silencio. "¿Te gusta la comida? te noto.. pensativo.. si no te gusta puedes pedir alguna otra cosa..." Shaun rápidamente negó con la cabeza. "N-no.. no es.. no es eso.. la comida está b-bien.." Susurró mientras daba otro pequeño bocado. "Entonces.. ¿que te tiene tan pensativo?" Preguntó Neil mientras le miraba.. Shaun podía sentir esos ojos de color oscuro clavándose hasta lo más profundo de su alma.. como si tratara de leer sus pensamientos.. eso hizo que se removiera suavemente en su asiento."Solo.. n-no estoy acostumbrado.. a esto..." Neil rebosó una suave sonrisa en sus labios. "Ah no? ya veo.. tarde o temprano te vas acostumbrar.. te daré esto y más.." Un suspiro salió de sus labios al escuchar aquello.. él no quería eso.. no.. él no quiere este tipo de lujos, ama lo sencillo y sobretodo los básico.. por lo que nuevamente negó con la cabeza mientras tomaba el valor para mirarle a los ojos. "No... yo no quiero eso..." Neil solo pudo soltar una suave risa.. el echo de que negara tanto eso le divertía.. pero en el fondo no estaba acostumbrado a que le digan no. Cuando ofrecía el dinero y joyas.. la gente caía tan rápido incluso cuando le decían no, podía ver en sus ojos ese brillo de quererlo todo.. pero en aquel chico simplemente... no había brillo.. no había nada.. solo podía notar incomodes y... miedo?. Apretó ligeramente su mandíbula y frotó suavemente su sien. "¿Por qué? no entiendo porque no quieres estos lujos.. cualquier otra persona en tu lugar ya habría dicho que sí.." Shaun podía escuchar la molestia en su voz.. dejó de lado la comida y le miró nuevamente.. estaba cansado de esto. "Quiero.. irme.." El mayor entrecerró sus ojos mientras apretaba un poco la copa de vino. "No." Dijo sin más.
Shaun se enojó al escuchar aquello.. simplemente se levantó y comenzó a caminar para salir. Neil se sorprendió por el repentino movimiento que hizo, le agarró con fuerza de la mano y le acercó a él. Se acercó a su oído. "No me hagas enojar.. ¿de acuerdo? ahora siéntate y come." Su actitud era fría y cortante. El miedo invadió su cuerpo al ver tal cambio.. simplemente asintió y volvió a tomar asiento y continuó comiendo a pesar de no tener apetito. Durante toda la cena Neil no le quitaba la mirada de encima, estuvieron en silencio durante ese rato.. finalmente terminan de comer y Neil paga la cuenta. Al salir le tomó por fuerza del brazo para asegurarse de que no saliese corriendo o algo. La noche era fría.. la luna llena daba una buena luz a las calles.. en cuestión de minutos el auto con el que habían llegado nuevamente estaba allí, al entrar la tensión se puso peor. Miró por la ventana queriendo llegar a casa por fin.. pero los escalofríos volvieron a su cuerpo cuando veía que el camino por donde iba el carro no era la dirección de donde vivía por lo que miró con rapidez a Neil. "¿A d-donde vamos?" Neil sin mirarlo o cambiar su actitud habló de manera fría. "A mi casa." Shaun negó rápidamente. "No.. no.. yo quiero i-irme a mi casa.. qui-" No pudo terminar cuando la mirada fulminante se clavó en sus ojos.. guardó silencio y se acomodó en el asiento.. en ese momento se estaba arrepintiendo de haberle ayudado en el hospital.. se había metido en un gran problema que no sabía como salir.
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My Dulcinea.
RomanceEn un hospital pequeño pero bullicioso, el residente Shaun Murphy se encuentra con un nuevo paciente inesperado: Neil Meléndez, un mafioso herido. A pesar de sus antecedentes poco convencionales, Shaun atiende a Neil con profesionalismo y dedicación...