Sterek Vs Mafia

Juegos peligrosos

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Stiles

Pude finalmente conciliar el sueño después de tanto tiempo. Sin embargo, la fugaz paz que encontré fue abruptamente interrumpida por mis sueños, o más bien, recuerdos que se empeñaban en asaltarme cada vez que mi mente lograba encontrar un atisbo de calma. Es como si mi cerebro estuviera decidido a recordarme todo lo que intentaba olvidar.

Tengo un fetiche con auto despreciarme. 

Regresé a Beacon Hills y le expliqué a mi papá que estas eran unas vacaciones merecidas por la última misión, un éxito casi récord en términos de tiempo. Él me sonrió con ese orgullo que siempre tenía reservado para mí. Esa sonrisa siempre me ha hecho sentir que podía con todo.

Me instalé en su casa, necesitaba proyectar tranquilidad y relajación, así que me repetía mentalmente que eran "días de vacaciones" frente al espejo, como si eso fuera a hacer que me lo creyera. Pero a medida que avanzaban los días, me di cuenta de que deshacía meticulosamente todo lo que me habían ordenado borrar. La misión había sido sorprendentemente simple, dejando un montón de tiempo para permanecer en mi antiguo hogar.

Y, para hacer las cosas aún más interesantes, resulta que Derek también regresó a Beacon Hills. Parrish me informó que estaban organizando la expansión nacional de las "Empresas Hale". Derek y Cora planeaban establecerse aquí. Por si fuera poco, me enteré de que Peter se casaba, ¡sí, se casaba! Con Lydia. Eso fue una sorpresa monumental, digna de una película de Hollywood.

Antes de cortar completamente los lazos con Beacon Hills, me había distanciado no solo de Lydia, sino también de Scott y el resto de la manada. La verdad, me sentía un poco extraño al respecto, pero ya no estaba al tanto de lo que sucedía en ese mundo; sencillamente ya no formaba parte de la manada. Y, para ser honesto, parte de mí se sentía aliviado.

Un día, mientras caminaba por el centro de la ciudad, tuve la suerte de encontrarme con Derek. Me sorprendió verlo sonreír, lo cual era una rareza digna de museo. Fue un saludo tranquilo y entablamos una breve conversación, algo más ligera de lo que esperaba. Nos intercambiamos números —cosa que no creí que haríamos—, y Derek se disculpó. ¡Sí, se disculpó! Eso es algo que rara vez sale de su boca. Hablamos un poco sobre lo que había sucedido con Scott y le dije que ya no importaba. Era como un pequeño ritual de limpieza, un intento de dejar atrás el pasado.

Nos despedimos y, esa misma noche, empezamos a intercambiar mensajes. Me dio un poco de miedo al principio, pero a medida que las palabras fluían, me di cuenta de que esto podría ser el comienzo de algo muy aparte de la manada, del Hale que amenazaba con arrancarme la garganta, y de el asunto del humano que corría con lobos. 

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Derek: Hola.

Hey.

Derek: ¿Cómo estás?

Sobreviviendo.

Derek: Bueno, eso es algo.

Sí, supongo. ¿Y tú?

Derek: Haciendo lo que puedo.

¿Algún problema sobrenatural?

Derek: No por ahora. Cosas más mundanas.

Eso es raro viniendo de ti.

Derek: Las cosas cambian.

Derek: Lydia y Peter están comprometidos. Les hable de que estabas en Beacon Hill's y me pidieron que te preguntara si querrías ir a su boda.