avíspate po

veinte

marti

- ¡Pongan atención, cotorras culiás!- gritó la presidenta del curso cuando cachó que nadie le estaba poniendo atención. El profe jefe la fulminó con la mirada, pero no dijo ná, yo cacho que porque en el fondo él quería hacer lo mismo cada vez que nos poníamos a webear en clases. Todos nos callamos, porque de verdad la Pauli da miedo cuando está enojá-. Ya, así me gusta- abrió su cuaderno mientras sonreía satisfecha-. Este viernes vamos a hacer la venta de los globos para juntar la plata que nos falta para la gira de fin de año. Voy a dejar en el diario mural una hoja con lo que le corresponde hacer a cada uno. Porfa, sean responsables- puso carita de gato con botas-. Ya, los que quieran pagar cuotas atrasadas vengan para acá, los demás vean qué tienen que hacer el viernes.

Con la Alme y el Basti nos paramos y fuimos al diario mural a ver qué nos había tocado. A la Alme le correspondía traer dos bolsas de globos azules, y al Basti una bolsa de globos amarillos y salir a ofrecer globos a los cursos, al igual que a mí.

- Que paja salir a ofrecer a los cursos- el Basti frunció el ceño-. Me da ansiedad tener que hablar delante de todos, me siento juzgado.

- Si, aparte de que después los revientan y se pierde todo el trabajo- aporté.

- Para eso hacíamos una completada, al cuarto b le fue super bien cuando hicieron la de ellos- suspiró la Alme mientras nos devolvíamos a nuestros puestos.

lo que dijo automáticamente me hizo acordarme del Lucas. Desde el día que me invitó a salir no habíamos hablado casi nada, específicamente porque yo me había sentido insegura al verlo con la Amelia y me había puesto super distante con él.

sabía que estaba haciendo puro show al sentirme así, pero también sabía lo importante que había sido la Amelia en la vida del Lucas, y me sentía muy weona al haber pensado que se iba a interesar en mi cuando hace poco había salido de esa relación que lo había marcado tanto.

probablemente yo nunca le iba a gustar tanto como le gustó la Amelia.

- Chiquillos- la Pauli volvió a hablar, llamando la atención de todos-, ya no queda nada más por hacer y aún quedan varios minutos pal recreo, por si los que tienen que ir a ofrecer globos quieren aprovechar de ir altiro- dijo.

con el Basti nos miramos-. Podríamos aprovechar de ir altiro, ¿o no? así salimos del cacho- me dijo.

- Yap- me encogí de hombros y lo seguí a la salida de la sala.

las cosas con el Basti ya estaban más tranquilas. A pesar de que a veces le daban algunos bajones por lo de la Nadia, estaba manejando bien la situación, considerando que la veía todos los días porque estaban en el mismo curso y que estaba enamorao de ella hasta las patas. Se supone que íbamos a ir con calma para poder volver a ser mejores amigos, pero últimamente nos habíamos unido caleta, estábamos juntos casi todo el día y cuando no nos veíamos, hablábamos por mensaje.

no estaba segura de cuales eran mis sentimientos hacia él actualmente, porque a ratos aún me sorprendía a mí misma mirándolo como weona o poniéndome media nerviosa cuando estábamos muy cerca, pero no podía negar que una parte de mí también se había ilusionado caleta con el Lucas, así que no sabía qué hacer.

me sentía como Violetta cuando tuvo que elegir entre León y Tomás.

nos pusimos de acuerdo con los demás compañeros que iban a salir a ofrecer globos y, pa mi mala cuea, nos tocó ir a ofrecer globos a los cuartos, lo que quería decir que iba a tener que ver al Lucas.

por la chucha.

cuando terminamos con el cuarto a, pasamos al curso del Lucas. El Basti tocó la puerta de la sala y abrió la profe de lenguaje, le pedimos permiso para entrar a dar un aviso y ella nos dijo que sí. Era de las profes más tela del colegio.