war love | NICHOJOO

𝑒𝒾𝑔𝒽𝓉

— Hyung, pss, hyung —Maki susurro cuando entro a la cocina y encontró a la persona que buscaba.

— Hola Maki —saludo Yudai.

— Se que es temprano en la mañana y es muy tarde repentino, pero, ¿has notado extraño a Nicholas hyung?.

— ¿Extraño? —K aún seguía con un poco de sueño por lo que estaba tratando de entender lo que le decía el menor.

— Sip. Ha estado mirando a Euijoo hyung pero ya no como antes, como que sus ojos se ¿suavizaron? no lo sé, pero lo mira distinto y ayer los vi hablando.

— ¿Hablaron?.

— ¡Si! —grito en un susurro feliz— los vi cuando estaba con los chicos, hasta se sonrieron y todo. Hyung ¿crees que esta sea la señal que necesitaba el amor?.

— Espera, ¿los quieres ver juntos?.

— Claramente, duh.

— Bueno —K dejó su taza de café en la isla— tengo que decirte que estoy de tu lado está vez porque yo también quiero verlos juntos.

— ¡Oh my god hyung! —Maki se abalanzó sobre el mayor y lo abrazó fuertemente mientras daba pequeños saltitos.

— ¿Por qué nos abrazamos tan temprano?.

Maki se separó al escuchar la voz de Nicholas entrando a la cocina.

— Por nada hyung, es solo que K hyung me trajo mis galletas favoritas y le estaba agradeciendo.

— Oh, así que ¿le traes cosas especiales a Maki? —Nicholas levanto su ceja en signo de pregunta.

— Dime que quieres que te traiga pero no le digas a Yuma, por favor Nicho.

— Está bien —le dió una sonrisa que decía "he ganado".

— Luego podemos crear un plan —Maki le susurró en el oído a K mientras se alejaba y salía por la puerta como todo un niño inocente.

Y K tenía que confirmar que el pequeño Maki tenía razón, porque luego de recibir la pequeña información temprano en la mañana, decidió fijarse mucho más en Nicholas. Y de verdad esos ojos gatunos hablaban. Ya no eran pesados y fríos cuando se posaban en el castaño, veía como de vez en cuando sonreía secretamente y que cada gesto lo llevaba a confirmar más su teoría: a Nicholas le gustaba.

Y tal vez fue desde el primer momento, pero conociendo como es Nicholas jamás lo revelaría y esa podría ser su razón para atacarlo tan constantemente. Nicholas tenía una forma muy particular de actuar cuando alguien le gustaba.

⋆˚｡⋆୨୧˚ ˚୨୧⋆｡˚ ⋆ ˚｡⋆୨୧˚ ˚୨୧⋆｡˚ ⋆ ⋆ ˚｡⋆୨୧˚ ˚୨୧⋆｡˚⋆

Eran las diez de la noche. Hace menos de dos horas habían terminado de cenar y el mayor de todos decidió ir en busca de un alto con cabello naranjito. Y sabía que estaba detrás de esa puerta llena de miles de historias por contar, así que lentamente golpeó la superficie de madera, escuchando una afirmación y finalmente entró.

— Hola Euijoo.

— Hola de nuevo hyung.

— Se que es tu tiempo de lectura y no quería interrumpirte pero es el lugar más tranquilo y apartado del caos que hay afuera.

— Esta bien hyung, no es molestia —soltó una risita.

— Okay. Por lo que he podido ver, las cosas van bien con Nicholas.

"No eres para nada ansioso con el chisme K" se dijo mentalmente

— Oh si, he hablado más con él últimamente.

— ¿Y que opinas de él? si es que puedo saberlo claro.

— Bueno, a primera vista se divisa como alguien frío y distante pero cuando lo conoces es una persona agradable e incluso podría decir que dulce. El otro día hablamos y él me escuchó atentamente cosa que me pareció bastante lindo.

— Me sorprende que esté tan cerca de ti, normalmente no es así.

— Oh si, me dijo ese día que no suele abrirse tan fácilmente con otros.

— Pero contigo no le fue difícil.

Euijoo se sonrojó.

— ¿Qué significa eso?.

— Bueno, creo que pronto serán cuatro meses desde que ustedes llegaron y él ya te habló de si mismo, cuando con Fuma y Jo le tomó mucho más tiempo.

— ¿Realmente fueron tres años?.

— Mmh algo así, los ignoraba constantemente y solo me "hablaba" —hizo el gesto de comillas con sus dedos— de ellos para decirme que la comida que hicieron estuvo buena y yo le transmitía el mensaje en secreto a Fuma. Después con el tiempo se reía de las cosas que hablábamos, decía buenos días y buenas noches y cada vez comenzó a ser más suave. Contigo, en cambio, fue diferente. Puedo apostar que fue casi a los dos meses el que se fuera ablandando.

— ¿Quieres decir que tengo algo en particular o...?.

— Eres especial Euijoo, hay algo en ti que comenzó a funcionar en Nicho y es realmente bonito.

"Eres especial" las palabras aún seguían repitiéndose una y otra vez en su cabeza mientras estaba acurrucado en sus suaves sabanas con sus ojitos se cerrándose mientras caía dormido.