Serie de los LCW 07 - El Omega y el Asesino

Capítulo 7

En el largo viaje de regreso, Jinhwan no pudo resistirse a estirarse continuamente para tocar a Junhoe. No es que Junhoe se quejara en absoluto. De hecho, parecía estar disfrutando más que Jinhwan, si es que eso era posible.

Junhoe gimió. ―Sigue así, y vas a meternos en un accidente.

―Está bien, solo le diremos a Mir que fue un error―. Jinhwan pasó una mano por la cara interna del muslo de Junhoe, acercándose, pero sin tocar su polla.

―No, me niego a mentirle. Voy a hacer le digas la verdad. Además, ni siquiera traes el cinturón de seguridad. Si entráramos en un accidente, podría resultar lastimado.

Jinhwan le dio un ligero mohín. ―Pero no puedo llegar a ti si tengo mi cinturón de seguridad.

―Póntelo. Te lo prometo. Puede tocarme todo lo que quieras, una vez que lleguemos de nuevo a la vivienda de la manada.

Dado que a Jinhwan le gustaba el sonido de eso, se acomodó de vuelta en su lugar y se puso el cinturón de seguridad. Sin embargo, eso no lo detuvo de devorar a Junhoe con su mirada. Por una vez, Junhoe no tenía esa maldita capucha, y Jinhwan podía ver los rasgos del hombre en toda su gloria.

Junhoe realmente era el hombre más caliente que Jinhwan había visto nunca, y Jinhwan no estaba diciendo eso debido a que estaba a punto de dar su virginidad al hombre. Junhoe tenía toda la cosa 'sexy-escabrosa-al-dedillo', y vestía bien. Además, cuando él no estaba dirigiendo a Jinhwan, su sarcasmo podía ser cautivante en su propia manera especial.

Después de lo que parecía como un millón de años, la vivienda de la manada quedo a la vista. Después de estar en la coalición felino, parecía mucho más pequeña, pero Jinhwan se encontró más a gusto en su casa. La vivienda de los Lobos parecía más cálida y acogedora y menos como un cuartel militar. No cambiaría de lugar para nada.

―Llama a tus hermanos―, Junhoe ordeno.

―¿Por qué?―, Preguntó Jinhwan. ―Ellos no me están esperando de nuevo por al menos otro par de horas.

Junhoe desabrocho su cinturón, extendió la mano y agarró a Jinhwan por la parte posterior de la cabeza. ―Porque lo que he planeado tomara toda la noche.

¡Oh, muchacho! Jinhwan estaba realmente jugando con los grandes. No hay nada más que se pueda negar. La cosa era que no quería renunciar. En todo caso, quería sumergirse de cabeza, sonriendo todo el camino.

Con manos temblorosas, llamó a Joshua. Sabía que su hermano gemelo sería el más fácil de sus hermanos a tratar. Mientras esperaba a que Joshua respondiera, Jinhwan miró por la ventana, por lo que Junhoe no podría ver lo nervioso que estaba. Joshua respondió finalmente al tercer timbre.

―¿Qué pasa?― Pregunto Joshua.

―No voy a volver a casa esta noche―, Jinhwan respondió, sin rodeos.

Bien podría no irse por el tema. Él tenía mejores cosas que hacer con este tiempo. Además, había aprendido hace mucho tiempo que entre menos le dijera a Joshua las cosas iban mejor.

―¿Por qué no?― Joshua exigió.

Jinhwan suspiró. Él debe saber que su hermano no haría las cosas más fáciles para él. Quién dijo que la curiosidad mató al gato, obviamente, no había encontrado a un cierto Lobo Omega.

Dándole a Junhoe una sonrisa socarrona, Jinhwan respondió, ―Estamos haciendo algunos ejercicios de entrenamiento por la noche.

―¡Tu, putilla!―, dijo Joshua.

Jinhwan tuvo que morderse el interior de la mejilla para no reírse. Bueno, tenía que darle su crédito a su gemelo. Él no era tan ingenuo como Jinhwan creía que era. Solo le tomo 10 segundos para ver a través de la historia de Jinhwan.