Julio, un chico universitario con un don para cantar, vive dos vidas: de día, estudia en una escuela elitista, pero de noche, se convierte en un músico de talla mundial que enamora a todos con su voz y sus letras sobre el amor. Pero un día, harto de...
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❦ 22 de agosto del 2019 ❦
Son las 6 de la mañana cuando enciende mi reloj despertador, sintonizada en la radio, donde se escuchaba una canción que se volvió popular hace poco tiempo, de la nueva promesa del canto en el genero del pop en español, esta era "Entre Estrellas"
En el rincón de mis sueños, te encontré,
Bajo luces de neón, donde el amor florece.
Tu mirada como estrellas en la noche,
Un universo secreto que entre dos crece.
Comienzo a cantar al mismo tiempo que me percato de la canción que es la que suena,
Entre estrellas bailamos, en el baile del amar,
Tiñendo el cielo de colores, solo tú y yo, mi bien.
tu y yo, entrelazados en una canción,
Un amor que vibra fuerte, como eco en el corazón.
Procedo a cambiarme colocándome el uniforme que recién compre para la nueva preparatoria al mismo tiempo que sigo interpretando la música procedente de la radio.
Tus labios, poesía que susurra en silencio,
Como un suave viento que acaricia el pensamiento.
Tu, Yo y él, tres notas en el aire,
Componiendo un amor eterno, imposible de olvidar.
De la nada la canción se corta y los conductores comienzan a hablar, - Muchas gracias por sintonizarnos, esta es radio corazón, y si les esta gustando lo que escuchan, pues es la canción "Entre estrellas" de la nueva promesa del pop en español, del cantante "Jolie Fleur".
Apago la radio, ya que por fin termino de ponerme una peluca pelinegra la cual gracias al cielo cubre por completo mi algo alargado cabello blanco, a la vez que me coloque unas lentillas de color café oscuro para ocultar mi heterocromia, y por ultimo una pequeña gasa para esconder mi tatuaje de una mariposa con un signo musical. - Por fin estoy listo, espero por favor que esto valla bien por favor te lo pido mucho, también madre cuídame desde donde sea que estés - procedo a besar mis dedos, para después colocarlos delicadamente sobre una fotografía de mi madre que se encuentra rodeada de velas y algunas varas de incienso.
Al llegar al colegio público este se alzaba ante mi como un vasto escenario de oportunidades y desafíos. La atmósfera era tan diferente, era una sensación menos estructurada que la que dejaba atrás. Pero esto no me haría retroceder, si no que solo me empujaría para adelante, ya que como dice mi abuela, si retrocedes que sea solo para tomar impulso.
Comienzo a sumergirme poco a poco en este nuevo mundo tan desconocido para mi con solo una esperanza de encontrar mi propio lugar, un lugar que pueda llamar hogar, pero también se que mis secretos deben permanecer lo mas ocultos posibles, ya que no se que podrían ocasionar en este nuevo lugar si las personas se enteraran de quien soy en realidad.
A medida que caminaba por los pasillos, la curiosidad de quienes serian mis nuevos compañeros se reflejaba en mis curiosos ojos cubiertos por unas gafas sin aumento alguno.
Al entrar al aula, algunos lo veían con incredulidad, ya que era demasiado raro que alguien nuevo entre en esa pequeña escuela, por la mala fama que posee, mientras que otros mostraban un poco de curiosidad por saber quien era ese raro chico que se movía con bastante seguridad, y denotaba un paso digno de un modelo. En un instante comenzó a sentir el peso de las expectativas, junto con el anhelo de ser aceptado, pero también sabía que debía proteger con todas mis fuerzas mi verdadera pasión.
Las clases comenzaron, y me esforcé por pasar desapercibido. Me sentó en un rincón de la clase, sumergido totalmente en mis pensamientos, mientras las voces y risas de mis compañeros llenaban el aire. Aunque deseaba compartir aunque sea unas pocas palabras con alguien, el temor al juicio y la incomodidad me mantenían en silencio.
El día avanzaba lentamente, y ya esperaba ansioso el momento en que pudiera regresar a casa y sumergirse en las notas de mi violín. La primera clase inicio, ni si quiera supe que esta era la de francés hasta que el maestro me saco de mi trance,
- Julio, Julio.
- Presente - Digo tan rápido como pude y con una voz que sonaba algo graciosa, al darme cuenta de esto, baje mi mirada un poco, lo lamento mucho.
- Entiendo que usted no es de por aquí, así que lo pasare por esta vez - menciona con una voz algo molesta y excéntrica.
- Si, si, gracias maestro. - Ya mas nervioso hablo.
- Bueno, todos saquen una pluma negra y un lápiz, que haremos un examen sobre lo que aprendimos el año pasado - dice esto mientras reparte los exámenes caminando hasta a mi lado, - No espero mucho de usted ya que es nuevo, pero mínimo espero que lo intente, ya que esto no es tan difícil de saber incluso para alguien inculto - vuelve a usar su voz tan busca pleitos. Para rematar todos comienzan a reír, bueno la mayoría de ellos, él único que no lo hizo fue un chico que estaba sentado a contra esquina de donde yo me encontraba sentado. Al verlo me transmitió demasiado terror, era alguien alto, con un aura oscura, y tenia su cuello con un gran tatuaje el cual bajaba hasta perderse en su camisa negra. Al instante voltee para otro lado por el miedo que me daba.
Al entregarme la hoja de examen, escuche al maestro susurrar - putain de noir (maldito negro) - en una voz casi inaudible, al parecer solo yo me di cuenta de lo que dijo, esto rompió mi corazón, aunque ya estaba acostumbrado a este tipo de cosas, no sabia que dolería tanto, y tampoco me esperaría que alguien como un maestro me lo diría.
Al darme el examen estaba decidido a una cosa, mínimamente en esto no fingiría, el maestro no conocía de donde yo provenía, por lo que n sabe que yo hablo perfecto francés, así que al ver el examen lo conteste como un verdadero nativo francés. esto era demasiado fácil para mi, porque en mi antiguo colegio estaba en clases avanzadas de francés e ingles.
Al culminar el examen, le dije al maestro en un francés nativo, - Excusez-moi professeur, pourriez-vous réviser mon examen immédiatement ? S'il vous plaît (Disculpe profesor, ¿podría revisar mi examen inmediatamente? Por favor)- Con la mayor sonrisa falsa que puedo poner en mi rostro, en cambio el suyo se puso de tonos pálidos, parece que esta era una jugada que el no se la veía venir.
- Quoi de neuf professeur ? On dirait que vous avez vu un fantôme.(¿Qué le pasa profesor? Parece que vio un fantasma) - Pregunto aun mas sonriente que antes, todos mis compañeros se sorprenden de escucharme, incluso muchos se pusieron a susurrar en la parte trasera, pero no preste atención a lo que decían.
- Cla.claro, ahora lo reviso - Con la mayor satisfacción que e sentido en mi vida, di media vuelta y me retire a mi asiento, al sentarme, voltee un poco hacia el chico aterrador de antes, al observarlo bien, logre percatarme que mostraba una pequeña sonrisita, lo cual me hizo sentir un poco de felicidad dentro de mi.
Después de un tiempo pasaron varias horas de clases y al llegar a el final, las conversaciones y miradas curiosas persistían, pero nadie parecía querer dirigirme la palabra, pero tampoco es como que necesitara una amistad en el mismo instante que entro en una nueva escuela así que me retiro a mi casa, con el sol decayendo poco a poco en el horizonte, esto concluyó por fin mi primer día en el nuevo colegio, con mi nueva vida y con mi nueva identidad. Mientras caminaba hacia casa, me prometí a mí mismo que, a pesar de los desafíos que enfrentara, no renunciaría a mi amor por la música.
