¿Will you marry me?

CONVÉNCEME

Eran las nueve y media de la noche cuando Camila se armo de valor para ir hablar con su vecina, quiso arreglarse un poco para que por lo menos su vecina intentara ver que aunque no era atractiva había un buen gusto por los vestidos. Escogió un vestido color amarillo de cuello cuadrado y mangas cortas, se amoldaba completamente a su cuerpo lleno de curvas lo convino con sandalias unos zapatos bajos, decidió llevar el cabello suelto y ponerse una ligera capa de maquillaje, esperaba estar presentable para su vecina. Salió a pasos firmes al departamento de su vecina, lo pensó por diez largos minutos cuando por fin se lleno de valor y toco.  

No obtuvo respuesta de que su vecina intentara abrir, volvió a tocar ahora un poco mas fuerte que la anterior vez pero nada -Mierda- dijo maldiciendo por que a lo mejor ella ya había salido como de costumbre. 

Estaba dando la vuelta para volver a su departamento cuando la puerta se abrió -Hola bombo ¿Vienes por mas?- escucho la voz burlona de su vecina atrás de ella. Dio vuelta para verla y decirle que era una majadera pero se quedo muda cuando vio a Lauren en top deportivo y bóxer, aunque no hubiese querido posar su mirada en la cadera de la mujer fue inevitable ya que el bulto que dejaba ver era grande, mas grande de lo que ella vio una vez en su vida. Un carraspeo su escucho que hizo que quitara su mirada del miembro cubierto de su vecina y volteara a verla a la cara, volviendo a dejarla muda al ver el moretón que adornaba el la cara de su vecina justo en el ojo izquierdo y unos visibles golpes en sus costillas. A Lauren le irrito la manera en la que Camila la estaba viendo -¿Puedo Ayudarte?- dijo en tono mas serio. 

-¿Estas bien?- pregunto Camila por el estado de la mujer.

-Si, ¿Qué quieres?- volvió a preguntar, aquello ya la había irritado y el que su vecina no le dijera nada y solo la viera le molestaba. 

-Disculpa ¿Podemos hablar?- pregunto con las mejillas teñidas de rojo por la mirada de la mujer. 

Lauren sonrió al ver el estado de Camila y si mente viajo a la imagen de la pelicular que había visto -Estamos  hablando- dijo burlona. 

-¿Puedo pasar?- pregunto tímida. La mirada que le dio Lauren le dijo que si , vio a su vecina hacerse un lado para pasar y pensar ¿era ella o había a Lauren visto saborearse los labios? el error de Camila fue voltear para empezar hablar con Lauren, ya que la encontró mirando su trasero y sobando su miembro -¿Puedes ponerte algo de ropa?- pregunto molesta. 

-Me gusta estar así en mi casa, pero si quieres- dijo alzando sus hombros en señal de poca importancia y tomo unos pans que estaban en una silla del pequeño comedero para ponérselo -¿Así?- pregunto con sarcasmo.

-De eso a nada- contesto Camila suspirando al ver que aquella mujer seria difícil. 

-Toma asiento bombón- señalo el sillón de su sala. 

-No... no me digas bombón- pidió Camila. 

-Bien Camila ¿Qué se te ofrece? Esto ya me esta desesperando- dijo tomando asiento enfrente de la mujer, Camila no se había dado cuenta de la esencia de Lauren sobre la mesa que estaba enfrente de ella y aunque le valía madres el que su vecina lo viera no le pareció tan bien. 

-Tengo una propuesta que hacerte- dijo Camila completamente roja solo de imaginar la posible humillación si Lauren la rechazaba, tal vez hubiese empezado a platearle su propuesta si Lauren no la hubiese interrumpido. 

-Bombón no era necesario tantas formalidades, si- dijo poniéndose de pie y bajándose el pans junto con el bóxer liberando su miembro que tan solo de pensar en lo que le haría a Camila estaba empezando a cobrar vida. La mirada de Camila fue directo al miembro semi erecto de Lauren y la vio masajearse -¿Me quieres ayudar?- pregunto Lauren sonriendo e imaginado la boca de la morena que aun estaba sentada enfrente de ella con mucho asombro.