Bulma jalo del pomo de la puerta con todas sus fuerzas, pero fue inútil, Vegeta había puesto el seguro para asegurarse que la humana no tratara de sacarlo de su escondite.
—¡Vegeta, por favor! Abre la puerta…— Bulma suplica tratando de jalar de nuevo el pomo, pero sin respuestas satisfactorias. —Prometo no obligarte a ver a Goku, solo sal…—
Por otro lado, el otro Sayayin se sentó en el borde de la cama aturdido, es como si hubiera salido de una especie de trance, sintió que su mundo dio vueltas sin opciones de pararlo, no sabía por qué había querido hacer eso, si Vegeta le pedía alejarse él aceptaría inmediatamente y lo respetaría, pero esta vez fue diferente, es como si su celebro no le dio otra opción, como si no hubiera podido pensar por sí mismo, sintió como si su estómago se secara y se encogiera, por primera vez en mucho tiempo definitivamente no quería comer ni una migaja de comida.
Miles de pensamientos pasaron por su mente, entre ellos, Milk, ¿Qué haría ahora? Había tocado a Vegeta y eso significa una muerte inminente si pasaban mucho tiempo separados, ahora probablemente su esposa lo odiaría y probablemente también a Vegeta, ¿Tendría que dormir en la misma cama? ¿Tendrían que comer juntos? ¿Ahora no podría entrenar con alguien que no sea Vegeta? Su vida estaba arruinada y no había escape, estaba atrapado y era su culpa, por ser un imbécil, no había ni una mínima justificación a sus acciones, no quería saber lo mal que Vegeta seguro lo está pasando, todo por un tonto impulso.
Se llevó las manos a la cabeza y suspiró frustrado, no volvería a tener un momento solo con su mujer, ni con sus hijos, ni consigo mismo… Oh mierda, sus hijos, la imagen de Goten y Gohan paso como una estrella fugaz por su mente, se acabaron las cenas con Gohan y los entrenamientos con Goten, al menos de manera privada, ahora todo pasaría junto a Vegeta, cada momento de su vida será con él, todo sería diferente y la posibilidad de que sus hijos lo odiarán rondaba como un mosquito por su mente al mismo tiempo que quemaba su alma.
Bulma giro su cabeza ardiendo en odio. —¡Pedazo de idiota! ¿¡Cómo se te ocurrió?! ¿¡Que haremos ahora?!—
Goku levantó su cabeza, miro a su amiga, pero no puso que contestarle, su garganta estaba seca y su cabeza no podía encontrar una respuesta fija, solo miles de palabras sueltas.
—¡Contesta cobarde!— Bulma se tensó y se aguantó de correr y agarrar a su amigo de la infancia por los pelos.
—Yo… No sé lo que pasó… No sé lo que me pasó…— Goku se levantó y miro a Bulma con súplica en sus ojos.
—Lo que pasa es que as atado a Vegeta a ti… Y ahora él no quiere salir del baño… Necesitamos encontrar una solución, no podéis estar unidos de por vida, es loco e irreal… Además de incómodo… ¿Entiendes que ahora Vegeta hará tu vida imposible?— El tono de voz de la mujer se calmó, no quería meter más leña al asunto y tensar aún más el ambiente.
—Tengo que hablar con él…— Goku dio unos pasos adelante, pero Bulma fue rápida y se puso delante de él, coloco firme una mano en su pecho impidiendo que siga caminando.
—No, eso lo haría aún peor, él necesita tiempo, tiempo para pensar, si le hablas ahora hay dos opciones, o te ignorará o te partirá la cara, no queremos ninguna de esas ¿verdad?— La mujer recibió un asentimiento como respuesta. —Entonces ten paciencia, cuando el este listo saldrá, no puede vivir toda su vida allí metido, cuando salga podéis hablar si él quiere—
El Sayayin volvió a asentir y retrocedió se sentó de vuelta en la cama tratando de calmarse, su cuerpo temblaba por toda la situación y el susto que llevaba consigo la misma.
Bulma dio una última mirada al Sayayin de clase baja y volvió su mirada a la puerta del baño para volver a atender a su exesposo.
—Vegeta… Dime si estás bien, ¿necesitas algo? Dímelo… No tienes que salir si no quieres ¿Está bien? Solo quiero saber si estas ahí…— Bulma pego con cuidado su oreja a la puerta para percatarse si había algún mínimo sonido.
Bulma escucho algo arrastrarse por el suelo, luego el grifo de la ducha siendo abierta al máximo, escucho el agua caer y vio un poco de vapor pasar por debajo de la puerta.
Mientras Vegeta trataba desesperadamente de quitar ese frío en su cuerpo, deshacerse de el, era desesperante e insoportable, puso el agua lo más caliente que pudo pero, aún podía seguir sintiendo el frío, era una tortura.
Una pequeña parte de él sabía la solución a su problema, pero prefería morir congelado que ir a los brazos de Kakarot.
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•Demasiado rápido para el amor• °Kakavege°
FanfictionVegeta le advirtió a Goku que no se acercara, que no le tocará, pero Goku no hizo caso, lo toco, sólo fue una broma, una broma que le costó a Vegeta y a Goku su libertad, ahora nunca podrían separarse. (Todos los derechos reservados a Tokiyama) Goku...