Capitulo 11

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Llegamos a la casa de Noah y antes que él pudiera tocar la manilla de la puerta, esta se abrió dejando ver solo a una mujer que estaba dentro del hogar, la cuál se veía sorprendida de verlo.

- Noah, corazón, ya me tengo que ir, cuidate - dijo aquella mujer a Noah para luego volver a verme - hola, ¿eres un amigo de Noah?, creo que te he visto antes.

- Madre, él es Cody, uno de los chicos que fue al programa y ahora es mi compañero, ¿te acuerdas de él?

- Mucho gusto - estendí la mano para saludarla pero ella me dio un rapido abrazo.

- El gusto es mio, tesoro - dijo para luego soltarme - Sientete como en casa, yo ya tengo que irme a trabajar pero espero conocernos mejor luego. 

La madre de Noah le dio un beso en el cachete y luego se metió a su auto para irse.

-Bueno, ya conociste a mi madre - Soltó Noah mientras abría la puerta con su mano y me hacía una seña para que pasará a su casa.

- Sí, se ve que te quiere mucho - Mencioné mientras entraba al hogar.

La casa de Noah era algo pequeña pero a su vez espaciosa, se veía muy ordenada y algo moderna a decir verdad, tenían algunos cuadros de pinturas en las paredes y otras cosas para decorar el hogar; logré visualizar también un mueble con varios libros, cosa que la verdad no me sorprendia mucho.

- En eso tienes razón, y perdona por él abrazo, ella suele ser muy cariñosa con todo el mundo, más si son amistades - Se disculpó Noah, lo cual era algo que lo hacía más lindo... Calmate Cody.

- No, tranquilo, Después de gira mundial me acostumbré a que me abracen así de la nada - Bromeé un poco, a lo que Noah solo frunció el seño - Cierto, mejor de Sierra no hablo.

- ¿Que? - Dijo mientras me volvía a ver algo confundido - ¿Por qué no hablaríamos de ella?

Noah me guió hasta la sala y nos sentamos en el sofá.

- Porque vos la odias - Exageré un poco solo para molestarlo y ver su reacción.

- Yo no la odio, me irrita, cansa, fastidia, pero no la odio - Su voz sonaba tranquila pero también ofendida.

- ¿Ah, no? - arqué la ceja tratando de imitar aquel gesto que siempre hace - Pues casi te peleas con ella, yo pensaba que sí

- Ella no merece mi odio - Cruzó sus brazos - Y ya se que tramas, de una te digo que no vas a lograr nada.

- ¿Me estás retando? En ese caso, dime Noah, que opinas de Gwen.

El me enjachó, sabía que con eso lo iba a poner entre la espada y la pared.

- Pues, me gusta su look... En fin, te quiero mostrar algo.

No me dio tiempo de reclamarle el que no me haya respondido la pregunta, ya que él me agarro de la muñeca y me llevó a un pequeño patio. 

- Mira - dijo con suavidad mientras tomaba mi rostro y me hacía levantar la mirada hacia el cielo.

El cielo estaba con unos tonos naranja, rojo, morado y amarillo, era el atardecer más bello que había visto en su vida aunque en realidad nunca se había puesto a verlos con atención, pero ahora que lo hacía no podía evitar quedar atonito con aquello tan hermoso.

- ¿Lindo, no? - Preguntó casi como si lo afirmara, yo solo asintí con la cabeza.

Noah se tiró al piso y se acostó en el césped, con una de sus manos me hizo una seña para que también me acostara y así lo hise.

- Siempre a esta hora vengo aquí solo para ver esto - susurró lo suficientemente alto para que yo pudiera escucharlo.

- Es muy hermoso - Comenté aún embobado con aquel paisaje.

¿𝓒𝓸𝓶𝓸 𝓽𝓮 𝓮𝔁𝓹𝓵𝓲𝓬𝓸? │♡│《𝓝𝓸𝓬𝓸》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora