Sonny entraba al gimnasio casi corriendo. Miró alrededor pero no encontró a sus compañeros. Uno de los asistentes lo vio y le avisó que estaban en la cancha. Era obvio que estarían allí, pensó Sonny. Hoy estaba bastante distraído o quizás aún con sueño. Le agradeció y sin perder más tiempo se fue directo hacia allí.
Delante de él iba caminando el preparador del equipo. Este, sin percatarse de que Sonny lo seguía, abrió torpemente la puerta. Esta se dirigía directamente al rostro del coreano, pero una mano la detuvo antes de que se estampara en su cara. Heung-min miró la gran mano y continuó subiendo, observando el brazo que estaba cubierto por completo de tatuajes. Sabía de inmediato quién era. No podía creer lo que le estaba pasando. ¿Por qué justo a él le tenía que estar ocurriendo esto? Sin pensarlo, se dio vuelta y luego se arrepintió de haberlo hecho. Quedó cara a cara con Cristian. Se miraron unos segundos. En esos segundos, Sonny no pudo evitar apreciar el rostro de Cuti: sus pestañas largas, su mandíbula, su grande y hermosa boca, y su linda piel morena. Notó un leve rubor en esta última. Se veía demasiado dulce de esa forma, pensó. De inmediato, se alejó solo un poco de Cuti para no estar tan cerca e incomodarlo.
- No te golpeó, ¿no? -habló el cordobés un poco torpe.
- No, no... Gracias, Cutie.
- No fue nada... ¿Todo bien?
- Sí, sí... ¿Vos?
- Sí, todo bien... Bueno, ¿vamos?
- ¿A dónde?
- A entrenar...
- Ah, sí, sí, vamos... Sonny quería que la tierra se abriera y lo tragase. No podía creer lo estúpido que se volvía tenerlo tan cerca. Cuti se le adelantó y le sujetó la puerta para que pasara. Esas simples cosas hacían que a Son le gustara aún más. Una parte de él deseaba que no fuera así, pero ya era demasiado tarde, le gustaba y mucho. Dejó esos pensamientos acompañado de un pequeño suspiro.
Caminaron juntos hasta la cancha y, una vez pisándola, fueron separados por Pedro, quien rodeó con su brazo a Son y se lo llevó para su lado. Cuti se moría de celos, pero no podía hacer nada. Solo le tocó mirar cómo Pedro se lo llevaba. Sintió un leve pinchazo en su costilla, se giró y vio que era Deki que venía para que se uniera a su equipo. Cristian seguía enfocado, mirando cómo Pedro estaba con Son. Deki tomó del brazo a Cuti y se lo llevó. Cuti se dejó guiar, mientras pensaba que algo tenía que hacer. No podía permitir que el español se quedara con lo que es suyo.
Tengo que modificar algunas cosas y subiré otros más...
Gracias por leer 💋💋💋
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Sólo mío [ cutison ]
RomansaUna historia producto del insomnio. En esta historia nada es real, mucho menos personal, es simplemente ficción.