La + linda del amor | Matias Recalt/Blas Polidori

Capitulo V

"Espejismo"

Pasaron unas dos horas ahí arriba, riéndose de los comentarios que la gente hacia con respecto a su "relación", como los plasmaban los medios, también hablando sobre quienes eran y quienes buscaban ser, o sobre nada en particular, hasta que el celular de ambos vibró, en el de Matias era un mensaje de Juani Caruso, lo invitaba a cenar y después a una previa que se hacia en la casa de un conocido. Por otro lado en el celular de Ludovica la notificación era de instagram:
"(blaspolidorii): hola lu, como te dije q iba a pasar no me pude olvidar de vos, ahora si, me aceptas una salida?"
No sabia que hacer, había disfrutado estar con Matias pero era la primera vez que se veían solos como para pensar en algo remotamente parecido a la exclusividad, además había sido lindo jugar con los rulos de Blas hasta que se quedo dormido, era una escena que aunque sea una vez, en el fondo de su conciencia, sabía que quería repetir.
- ¿Lu, queres que te lleve a tu depto? Yo tengo que ir a cenar y después a una previa en un rato con Juani - Le dijo Matias mientras la ayudaba a pararse en el techo
- Dale - Respondió mientras se acomodaba para bajar por las escaleras
Cruzaron las gradas, Matias se escondió entre ellas asustándola (2 veces).
- Sos un cómico Matias - Dijo sarcástica mientras recuperaba el aliento
- Y vos sos una piba muy impávida también.
Rieron ambos. Matias se congeló mirándola reír unos segundos:
- Viste cuando tu tío dice "Pero nena tu risa es la magia de los rocanroles", ya entendí a que se refería.
Ludovica se limitó a sonreír mientras miraba hacia abajo para disimular el color bordo que había tomado su rostro. Siguieron caminando en un tierno silencio hasta llegar al auto, mientras él conducía mirando al frente, ella lo miraba, analizaba cada centímetro de su rostro, una nariz recta algo grande, ojos inmensos y oscuros, pómulos marcados y unos labios bien definidos.
- Deja de mirarme, porque me estoy aguantando las ganas de frenar el auto y encajarte un beso - Dijo el morocho sorprendiéndola.
- ¿Y por que no lo haces? - Respondió ella
La respuesta de el fue pegar un volantazo, dejar el auto al costado de la ruta y tomar fuertemente el rostro de la rulienta, uniendo vigorosamente los labios de ambos. Ella puso una de sus manos en la nuca de el, enredando sus dedos entre su pelo, tirando con algo de fuerza por momentos. El dejó una mano en su rostro y la otra la bajó lentamente por su cintura, atrayéndola con fuerza hacia su cuerpo. Eventualmente ella pasó su cuerpo por encima del de el, quien tuvo que hacer el asiento para atrás para caber ambos en el asiento piloto, ella se movía despacio encima de el morocho, que era quien guiaba aquellos movimientos con sus dos manos sujetando su cintura. Ella lo besaba con ambas manos colocadas en su nuca, mientras alternaba entre su boca y su cuello. Los movimientos de el eran cada vez más rápidos y bruscos, finalmente apartó sus labios de los de la chica y comenzó a besar su cuello, luego su escote, mientras ella soltaba leves suspiros, cuando estaba a punto de bajar los tirantes de la remera que traía puesta Ludovica, suena un celular desde dentro de la guantera, era el de el. Ella se baja encima de encima de el, volviendo al asiento de copiloto y alcanzándole el celular. El atiende el teléfono de mal modo con la respiración aún algo agitada, mientras el hablaba ella se acomodó el pelo, remera y el maquillaje en el espejo del auto, sus rulos oscuros estaban alborotadisimos. Matías corta la llamada.
- Era Juani, dice que tiene hambre y que me apure, que forro.
- Tranqui, volvamos.
Matias vuelve a encender el auto y en cuestión de 10 minutos llegan al departamento de la periodista.
- La pase muy bien con vos hoy - Dice ella cuando se acerca a despedirlo de un beso en el cachete
El le roba un beso en los labios y sonríe pícaro mirándola a los ojos.
- Yo también la pase muy bien con vos - Se despide
Giro las llaves nerviosa, sintiendo la mirada de el en su espalda, antes de entrar le sonrió como saludo final.
Fue a darse una ducha y cuando iba a poner música, leyó otra vez el mensaje de Blas, se había olvidado por completo, no sabía que hacer, después de ese día no podía negar que le pasaba algo con Matias pero bueno, el esa misma noche tenía una previa, ¿Que le aseguraba que no iba a estar con otras pibas ahí? a Ludo esa idea no le gustaba pero tampoco le molestaba, era una persona celosa pero ¿que podía exigir si se conocían hace solo 3 días? Le faltaba conocerlo muchísimo más y aparte, ¿a ella quien le iba impedir pasar un rato con Blas? Luego de ese pensamiento se decidió.
+ "hola blas, perdón que tarde en contestar, y si, si quiero que salgamos"
- "estas ocupada ahora? como para que te pase a buscar en los próximos 5 minutos?"
+ "no, no estoy ocupada, a donde vamos?"
- "a dónde queres ir?"
+ "sorprendeme vos, nada más dame una pista así se como ir vestida"
- "bueno conozco un lugar, no muy elegante, pero tampoco muy casual, te diría que te pongas linda, pero no creo posible que te salga de otra forma"
+ "perfecto, te espero"
Le paso su dirección a Blas y comenzó a vestirse ya que aun estaba en toalla, se puso un vestido corto verde oscuro, con un estilo de blazer engomado, botas cortas y su cartera negra con forma corazón de vivianne westwood. Apenas llego a aplicarse rimmel y labial cuando le llega una notificación de Blas, estaba afuera.