CAPITULO 5

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SooBin no lo podía creer. No podía creer lo que hizo minutos atrás.

Ya vestido y hecho un ovillo en el sofá de su salita de estar, la televisión dando un programa matinal que ni le prestaba atención, SooBin se carcomía la cabeza intentando procesar lo que había sucedido en el baño.

¡Había dejado que un demonio lo masturbara!

De alguna forma, eso se sentía mal. Muy mal.

Pero también se sintió, bien. Tan jodidamente bien.

Incluso ahí recostado, su piel seguía cosquilleando, ansiando una vez más el toque perverso del demonio.

¿Qué le había hecho ese ser infernal? ¿Volverlo adicto al sexo?

Imposible. Él se consideraba demasiado tímido para volverse adicto con solo eso. Además, su experiencia en ese ámbito era bastante acotada. Había tenido sexo antes, primero con su novio de instituto. Luego que terminaron, tuvo una relación más con un gamer que conoció en un evento de anime. Las cosas anduvieron bien, tuvieron algunos encuentros casuales, pero al final decidieron dejarlo hasta ahí, porque aparentemente, SooBin era muy frío en la cama.

No era frío. Era tímido, que es distinto. Necesitaba sentirse en confianza para intentar más y por ahora esa confianza no la había logrado. Antes se moría de vergüenza que intentar algo más caliente o alocado. Como tener sexo en la ducha. Había pensado que eso sería peligroso. Era demasiado alto y tal vez un poquitín torpe, esa mezcla pareciendo perfecta para el desastre. Sin embargo, no había recaído en ninguna de esas cosas mientras el demonio los masturbaba.

Se sonrojó ante el recuerdo.

- Deja de martirizarte, eso no es nada comparado a lo que te haré en la noche

SooBin tembló ante esa conocida voz, pero esta vez no brincó. Con mala cara observó al demonio que estaba sentado sobre la mesada de la cocina, con una taza en mano y bebiendo lo que parecía café.

¿Cuándo se sirvió esa taza?

La verdad, no importaba.

- No me estoy martirizando. No estoy acostumbrado, es todo

- ¿Tú primera vez en la ducha? – tarareó divertido YeonJun, pero se atoró con su café al ver que el otro se sonrojaba y volteaba el rostro - ¡¿De verdad es tu primera?! ¿Estás seguro que no eres virgen?

- No soy virgen – aseguró con dientes apretados, enfrentándolo de nuevo – Solo no se dio la oportunidad antes y...no tengo porqué darte explicaciones

- Hum...

YeonJun ladeó la cabeza. Al parecer el humano era más inexperto de lo que aparentaba. ¿Tal vez por eso lo había llamado? ¿Para llenar ese... vacío?

No era la primera vez que le sucedía. Invocación para cumplir fantasías insatisfechas.

De alguna forma, pensar en ello, bajó su enojo y resentimiento contra el humano que tenía al frente. Ayer había perdido los estribos, pero eso fue total responsabilidad del humano por mantenerlo en el exterior como un perro. Si a eso agregaba la actitud del humano, eso catapultó su encabronamiento, pero ahora, después de liberar un poco sus frustraciones - sobre todo en la ducha-, podía ver las cosas con más perspectiva.

- En ese caso, tendré que adaptarte

- ¿Adaptarme? ¿A qué...?

La frase de SooBin quedó suspendida en el aire, el demonio desapareciendo y apareciendo frente a él en un pestañeo, dejándolo con la boca seca de palabras.

Devil Never Mistake [YeonBin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora