3 chicos y yo

Antes de OT

Mis padres no nos creían del todo sobre lo de ir a Madrid, por lo que llamaron a los padres de Ashley, que lo hicieron genial, les aseguraron que nos invitaban porque sí y que no esperaban nada a cambio, también les dijeron que no se preocupasen y todas esas cosas de padres.

Al día siguiente nos montamos en el tren, no teníamos que alquilar hotel ni nada porque la familia de un amigo de clase tenía allí una casa para pasar las vacaciones, y él nos la dejó, dijo que se sumaba a la causa.

Lo que más me gustó al llegar a Madrid fue que nuestra casa estaba sólo a 5 minutos del Bernabéu, que estaba lleno ese día porque había partido, todas las personas que pasaban para ir a ver el partido llevaban bufandas, gorras y camisetas del Real Madrid, el nombre que más se repetía en las camisetas era HERMES, con un 7 enorme; Hermes era la estrella del Madrid, llegó tras una temporada increíble en el Manchester United y en seguida se ganó a la afición, era centro delantero, alto, guapo y llevaba el siete, todo encajaba, la gente sabía que estaba hecho para sustituir a Cristiano Ronaldo, desde su pelo hasta su equipo que lo propulsó al Madrid, para los merengues él era perfecto, y no era para menos, con su metro ochenta y nueve, su pelo negro y sus ojos, del mismo color que su recién adquirido balón de oro con sólo 18 años hacían de Hermes un dios en carne y hueso (nunca mejor dicho, porque en la mitología griega era un dios olímpico, y, para hacer más grande la ironía, el dios más rápido). La verdad, para que negarlo, Hermes era adorado por las hinchas del Real Madrid, estaba soltero, y había dicho varias veces que no había conocido todavía al amor de su vida y que no le atraía la falsedad de las modelos.

Pero ahora no tenía la cabeza como para pensar en futbolistas, me pasé todo el día delante del piano, afinando, y cantando, mi hermano y Ash se aseguraban de que cuidaba la voz todo lo que podía, y, para el Casting, llevé las dos mejores canciones que me sabía, las canciones que me dieron confianza como para cantar en el Instituto y con las que de hecho, había aprendido a cantar, Chandelier, de Sia y Rolling in the Deep, de Adele. Yo no quería, porque en OT debían de estar hartísimos de esas dos canciones, pero bueno, además, para cantar algo en español, escogí el Vas a Quedarte de Aitana, mi hermano y Ash no estaban para nada de acuerdo, porque odiaban a Aitana, pero yo necesitaba cantarla, Aitana se había hecho famosa en OT, y, para qué negarlo, yo quería seguir sus pasos.