00 | Contact him.

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—¿Entonces? Es entre Jeon Jungkook; 24 años, ex-alumno de Oxford, con una tesis realmente tentadora o Min Yoongi; 25 años, ex-alumno de Standford y especialista en pruebas de mutación. ¡No tengo toda la maldita tarde!.—Soltó furioso el hombre que se encontraba sentado en la que parecía ser una reunión de vida o muerte.—Debemos encontrar alguien que pueda domar a esa aberración que tenemos como experimento, es eso o todo en lo que trabajamos se va al diablo ¿entendido?.

—Choi, entiendo la desesperación del caso pero no podemos meter a cualquier chico al juego, ¿si no aceptan? ¿crees que se quedarán callados?. Los medios pagarán millones para tener la información que les dimos.—Mencionó el rubio nervioso por la reacción que pueda tener su superior.

La tensión era abrumadora en la sala clandestina a varios metros bajo tierra, los hombres de brazos cruzados o con las piernas temblando y moviéndose de lado a lado, estaban perdidos, o mejor dicho, jodidos. La bestia, como lo llamaban, despertaría pronto y ellos no tenían una respuesta para el caso, ni mucho menos un encargado.

Tenían que tomar una decisión. 

Apresurada, y quizá errónea, pero necesitaban tomarla en ese preciso momento.

—No hagamos esto más largo Park, ¿si?. Voto por Jeon, parece saber lo que hace, además que sus investigaciones son lo que buscamos, sin embargo, sería estratégico tener a Min cerca, por si Jungkook resulta ser incompetente. Le daríamos dinero, se larga del país, nunca menciona lo que pasa en el Búnker y seguimos el experimento con Yoongi.—Dijo convencido el hombre sentado a la esquina de la mesa. Tenía todo calculado, típico de Kim Namjoon, líder innato.

—Lo mismo que Kim, llamen de una maldita vez al muchacho y que se presente lo más pronto posible. Nadie acá puede inyectar un solo químico a esa cosa desde que Soojin la cagó. Todo por no aprobar un jodido curso de genética. Ah, también llamen al otro, lo llevaré a la sede principal y que trabaje con normalidad experimentando en plantitas.—Soltó con risa el último en la gran mesa, dispuesto a marcharse en cuanto terminó de hablar.

—Hoseok, espera.—Detuvo al muchacho que estaba dirigiéndose a la puerta del cuarto.

—Hagamos esto rápido. Quien esté en contra de llamar a Jeon Jungkook haga saber su opinión en estos momentos.

Nadie habló, todo permaneció en silencio.

—Al parecer ya tenemos un encargado. Llamaremos a Jungkook. ¿De acuerdo Park?.—Preguntó Choi al rubio, quien al parecer no estaba de acuerdo con la decisión que se estaba tomando.

Park sabía que eso no terminaría bien, sabía que al final todo terminaría yéndose a la mierda, el experimento 1230 fracasaría y luego tendrían una gran deuda con el gobierno. A menos que las cosas cambien, los avances sean alentadores y al final se deshagan de ese hombre que era usado como prueba, quedándose solo con el líquido de la infección y luego hagan felices a inescrupulosos líderes políticos que lo único que querían era poder y claro, mucho dinero.

—Si señor. Llamen a Jeon.

La reunión terminó y cada uno volvió a sus puestos de trabajo. Regresaron a sus pruebas que raramente eran ¿humanos? o bueno, no humanos del todo, pero que en algún momento lo fueron.




[...]




El teléfono sonó y no dudó en responder.

—¿Hola?

"¿Jeon Jungkook?" Resonó al otro lado de la línea telefónica.

—Si, habla Jeon. ¿De parte de...?

"Somos de un laboratorio. Te enviaré un mensaje, léelo rápido y dame una pronta respuesta" Dijo el extraño para inmediatamente cortar la línea, dejando al castaño completamente confundido por lo que había escuchado hace unos segundos.

—Estafadores, como si fuera idiota para creerme esas cosas, pff.—Habló el joven. Se sentía nervioso por alguna razón, porque claro, lo habían llamado de parte de un supuesto laboratorio para quien sabe qué y luego le colgaron el teléfono de la nada. ¡Quién no estaría asustado! 

Dejando de lado lo vivido, se dispuso a levantarse de su escritorio en el que revisaba unos apuntes para ir a la cocina por un poco de líquido, sin embargo, la vibración de su celular interrumpió su paso.

"Somos de Korea's labs, nos gustaría contar

 contigo para un nuevo proyecto...."


¡Su sueño estaba por cumplirse!

Había por fin encontrado una buena oferta por parte de un gran laboratorio ¡Su vida estaba resuelta!

Jeon Jungkook no alcanzó a leer todo el mensaje ya que estaba completamente ido por la felicidad que le ocasionó el solo leer el nombre del laboratorio que buscaba trabajar con él. Su objetivo estaba cada vez más cerca, y claro, no desaprovecharía esa oportunidad, conocería científicos con años de experiencia e ideas fuera de este mundo, no había nada mejor que eso.

No lo pensaría dos veces y aceptaría el trabajo, sin importar lo que tenga que hacer como en qué o en quienes tendría que experimentar. 

O eso cree.




Experimento 1230 | TKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora