The Villainous Shizun Is As Beautiful As A Flower

CAPÍTULO 12

El anciano de la Secta Qingling siempre ha residido en la antecumbre para la conveniencia de dirigir a los discípulos de la cumbre principal.

Su Baiche estaba en el pico Huannan, y los discípulos dentro del pico lo aprecianba mucho. Dudaban en perturbar la tranquilidad del anciano, por lo que rara vez lo molestaban.

Pero en este momento, su residencia estaba rodeada de gente.

-No presiones, déjame ver. El Inmortal Shen está aquí-.

-Oh no, debe tener la intención de intimidar a Su Zhenren. La última vez que vino, destrozó todo lo que había en la habitación. Es extremadamente abominable-.

-Rápido, informa al Líder de Secta. El Shen Inmortal volverá a oprimir a los débiles-

-Espera un momento, mira al señor Inmortal. Tenía algo en la mano y olía extraño, con olor a quemado-.

-¿Podría ser veneno? Esta no es la primera vez. La última vez, intentó darle la píldora desfigurante a Su Zhenren, un acto escandaloso. ¡Esta vez debemos proteger a Su Zhenren!-.

-¡Sí, protege a Su Zhenren!-.

-Vas primero-.

-No, tú ve primero-.

Su Baiche estaba en la puerta, con su cabello negro cayendo sobre sus hombros. La luz de la luna iluminaba sus mejillas y brillantes gotas de agua permanecían en su delicada e impecable piel. Acababa de terminar de lavarse y se preparaba para descansar cuando un invitado inesperado lo llamó a la fuerza.

Reprimiendo su ira, puso una sonrisa gentil y cautivadora y preguntó: -El Inmortal Shen vino de visita tarde en la noche. ¿Cuál es el asunto importante?-.

-Estoy aquí para entregar sopa de semillas de loto-., ofreció Shen Liuxiang el cuenco de jade.

Su Baiche apretó los dientes por dentro.

Había dicho claramente que no lo bebería durante el día. ¿Esta persona lo hizo a propósito?

Reprimió el impulso de ahuyentarlo y habló suavemente: -Inmortal Shen, tal vez lo hayas olvidado, pero dije que no lo beberé-.

Shen Liuxiang miró a los discípulos, cada uno de ellos mirándolo como si estuviera cometiendo algún acto escandaloso.

"..."

De hecho, había venido a traer sopa de semillas de loto, pero era solo un pretexto para probar a Su Baiche.

-Pero lo traje-., Shen Liuxiang dio un paso adelante y le presentó el cuenco a Su Baiche con una sonrisa en los labios, una sonrisa traviesa que albergaba malas intenciones.- Su Zhenren, deberías beberlo-.

-¡El anciano no debe beberlo!-.

-Debe ser venenoso-.

-Shen Liuxiang es tan audaz frente a los ojos de todos-.

Los discípulos a su alrededor estaban alborotados, pero a pesar de su clamor, nadie se atrevió a dar un paso adelante.

Su Baiche bajó la mirada, ocultando la frialdad en sus ojos. -¿Es venenoso?-.

Tong Xi respondió: -No lo sé-.

Su Baiche dijo: -Entonces déjame aplastarlo-.

Sostuvo el cuenco entre sus dedos helados y luego fingió agitarlo antes de soltarlo abruptamente.

El cuenco de jade cayó y una leve sonrisa apareció en los labios de Su Baiche.

Inesperadamente, al instante siguiente, una voz exclamó: -¡Ten cuidado!-.