03.

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Estaba sentada en la azotea del edificio en el que vivía con Mikey, observando la situación en un máximo esplendor, aunque yo no me encontraba de la misma forma. Aún no comprendo el porque Ran hizo que Ryosuke terminara conmigo, una persona que ame por mucho tiempo y que un idiota egoísta arruinó en cuestión de segundos, a pesar de los años sigo dolida.

Suspire con algo de frustración y simplemente me abracé para tratar de darme calor, pero sabía que no podía. Pocos segundos después sentí como alguien colocaba algo en mis hombros y al girarme a ver de quien se trataba me quite rápidamente la parte de arriba del uniforme de Ran y se lo tiré en la cara.

—¿Vienes a burlarte de mí? Solo dejame en paz Ran Haitani, no quiero tener nada que ver contigo y si me haces el favor solo aléjate.

Expresé con angustia. Ran suspiró y se acercó a mí para abrazarme, trate de alejarlo, pero su fuerza era increíble, así que dejé de resistirme.

—Mai... Me pides que me alejé, pero para mí es algo imposible ahora que estoy flechado por ti, solo dejame estar a tu lado... Prometo no dañarte.

Reí con irónia y le di una patada en su parte baja, casi que causó que me soltara de golpe y se arrodillara ante mí por el dolor. Lo mire con enojo.

—No te quiero a mi lado Ran. Solo dejame en paz...

Dicho esto regresé al interior y fuí a mi habitación, después de todo me encontraba sola en nuestro departamento, y que Ran estuviera aquí me daba mucho que pensar. Que miedo.

Sentí como sus pasos se acercaban a mí, pocos segundos después se aferró a mí haciendo que ambos cayeramos al suelo. Grite de dolor al sentir como mi brazo crujio a causa de su peso y empecé a llorar sin consuelo alguna. Cosa que alertó a Ran y me cargó como princesa para así salir del edificio mientras yo lloraba en sus brazos.

—¡Duele mucho! — tome mi brazo rotó y me  acurruque en su pecho, poco me importaba ahora.

Ran me miro y se subió a su auto, dejando en el asiento de copiloto.

—Discúlpame por esto cariño... Fue sin querer...

Ignore sus palabras y seguí llorando. Él sin tener respuestas empezó a conducir como loco hasta que minutos después llegamos al hospital.

Estaba tan centrada en el dolor de mi brazo que no me percaté que Mikey estaba justo frente a nosotros, él al ver que Ran me cargaba en sus brazos y yo me venía quejando por el dolor de mi brazo lo miró con furia.

—¿Qué mierda ha sucedido con el brazo de Maisie? — cuestiono Mikey con algo de frialdad y me tomo en sus brazos.

Ambos nos quedamos en silencio, pues Ran sería el culpable de esto y al tener en cuenta que Manjiro estaba loco podría hacerle daño a Ran y no quiero que las cosas sean así.

—Yo... Yo me caí de las escaleras porque a alguien se le cayó algún líquido de limpieza... Ran me encontró y me trajo aquí. — mentí, Ran me miró asombrado y simplemente desvíe la mirada—. Manjiro, me duele mucho...

Manjiro me aferró a él y nos adentramos al hospital, donde me revisaron y efectivamente tenía el brazo roto, por lo que duraron una horas en ponerme un yeso para así regresar a casa.

Ran me llevo a mi habitación mientras que Mikey se ofreció en hacerme la cena y Ran no desaprovechó la oportunidad para agradecerme por haberle salvado la vida.

—Mai... Gracias por eso...

—No malpienses mi acción, solo lo hice para que te alejes de mí... — Expresé con malestar y Ran río.

—Mai... Déjame estar a tu lado, cambie por tí porque quiero ser tu novio... Por favor...

Me quedé en silencio,  ¿Cómo podía confiar en él? Es un mujeriego, sé que tarde o temprano se cansará de mí y me botara como lo ha hecho con las otras, no quiero que eso suceda, sería humillante.

Negué y lo alejé de mi con cuidado, ha que mi brazo sigue doliendo.

—No quiero, y así será por siempre. — dije neutra mirando hacía el techo y suspiro con cansancio—. Por tu culpa toda mi felicidad se fue al carajo, mi novio me dejó por capricho tuyo ¿quieres una razón más para odiarte? Bien, me rompiste el brazo y me acosas, estoy harta, Ran, solo... Solo dejame en paz.

Mis palabras sonaron cansadas, así me encontraba, yo no quería ser su novia, nunca lo sería, él arruinó todo lo que yo llamaba felicidad, yo lo odio por ser entrometido, por acercarse a mí solo para dañarme, yo no puedo darme el lujo de salir peor lastimada por él.

Ran se quedó en silencio, pero sentí que aún me miraba, por lo que cerré los ojos y a los segundos él habló.

—Maisie... ¿Qué te asegura a tí qué ese imbécil te amaba de verdad? Porque para que ya ande con novia se ve muy tranquilo. — bufe y abrí los ojos de golpe para mirarlo con molestia. Odiaba que me viera como payasa.

—Solo cállate, no me harás cambiar de opinión sobre tí. Eres detestable. — lo mire por última vez y le di la espalda.

Aunque sus palabras lograron golpearme un poco, era cierto, que me aseguraba a mí que Ryosuke me amaba porque podría solo simplemente haber salido conmigo por aburrimiento, después de todo no se atrevió siquiera a justificarse cuando me dejó, y no lo digo por el tema de Ran, sino que pudo ser más inteligente y tal vez así decirme alguna mentira, pero solo fue un idiota miedoso.

Tenía que ser un hombre, estúpidos y manipuladores, ¿ó solo eran mis malas experiencias?


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OMNISCIENTE—

Han pasado un par de meses en los cuales Maisie está por caer en la locura por culpa de Ran, este no se ha detenido en ningún momento para dejarla siquiera respirar un poco, para él ahora su único objetivo era que Maisie se volviera su novia y así poder vivir felices para siempre, pero Maisie no colaboraba en nada y eso lo estresa un poco, más el hecho que ella se dió la libertad de ahora conseguir pareja y eso a él le encabronaba.

Justo ahora Maisie estaba junto a un chico, este eran Niki, su mejor amigo, el cual había estado fuera del país por unos meses y ahora estaba con ella, abrazándola y tirándole piropos sin vergüenza alguna. Para ambos amigos era normal, pues se bromeaban siempre, pero para Ran esto lo había hecho llegar a su límite y su hermano Rindou se había percatado de eso.

—Ran... Será mejor que nos vayamos... Ellos dos están tranquilos y tú... ¡O mierda! — exclamó al ver a la lejanía como Ran tomaba por el cuello de la camisa al amigo de Maisie y lo amenazaba de muerte.

Rindou se acercó rápidamente a su hermano mayor y lo sacó del lugar antes que llegara la policía y que Maisie le diera unos buenos trancasos por imbécil, pero a Ran eso le importa a poco, había logrado cagarle el día a Maisie con su amiguito y no tardaría en hacer lo mismo con todo aquel que se le quiera acercar a la que pronto sería novia y esposa.

Cuando Bonten salió a la luz todo cambió, Maisie más protegida, y para su mala suerte su protector era Ran, nunca pensó que desde aquel momento en el que Ran la protegió en ese tiroteo ella lo vería de la manera que siempre odio,, y para el colmo se arrepentiría después.


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Fin del capítulo

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Gracias por leer hasta acá, nos vemos en el próximo capítulo
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~Smailer-Shimura

𝑊𝑟𝑖𝑡𝑡𝑒𝑟: 𝑆𝑘𝑎𝑟𝑙𝑒𝑛𝑡ℎシ︎

LOST IN THE FIRE | 𝑹𝒂𝒏 𝑯𝒂𝒊𝒕𝒂𝒏𝒊Donde viven las historias. Descúbrelo ahora