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La vida de Louis fue una desgracia desde que tiene memoria.

No tuvo una buena infancia y tampoco su adolescencia ha sido completamente feliz como cualquier chico de su edad. Tampoco sus padres fueron el ejemplo para que tomara un futuro digno.

Creció y la vida se encargó de darle puros golpes, viendo a sus padres hundirse en el alcohol, sufriendo mirando como su madre se deterioraba por los estupefacientes que consumía, y de no terminar sus estudios porque no tenían dinero para la colegiatura.

Conoció a Finn a los diecinueve años y creyó que su vida dejaría de ser un poquito miserable, pero él piensa que cada que pasan los meses se hunde más y más.

Tienen una relación bastante tóxica pero no visible ante sus ojos, atada a la manipulación y al maltrato. Según Louis las peleas son parte del proceso de la relación, pero cada vez se hunden más en su propio círculo vicioso.

- Tenemos la alacena vacía, Louis.

- Si, lo siento. - titubeó un poco y suspiró.- Ya no tenemos dinero.

Para la corta felicidad de Louis, se había ido a vivir con Finn a una pensión en donde solo pagaban el mínimo de renta y el baño era compartido. Esto lo pagaban con el "trabajo" de su novio, y Louis se encargaba de las compras esenciales que le daban en un supermercado a cambio de trabajar embolsando las compras de la gente.

- Tienes el trabajo. - el hombre lo miró de pies a cabeza y el ojiazul se sientió nervioso. - ¿Acaso vives en la calle, Chico?

Louis niega.

- No señor.

- Bien. Comienzas mañana. - le dijo fríamente.- Puedo darte la mitad del pago con algunos alimentos si así lo deseas.

El dueño le había tenido compasión cuando lo vio todo débil y con un hematoma en su ojo derecho.

- Estos jóvenes de hoy en día, se pelean con cualquier muchacho que se les cruce.

el ojiazul escucha al que sería su nuevo jefe y le quiere explicar que el causante del hematoma no fue en una pelea sino su propio novio, pero no debía.

Confiaba en que pronto llegaría algo mejor a su vida, mientras tanto se refugió en una vida tóxica junto a su pareja, a quien todos los días perdonaba por los golpes que le dejaba, y a quien todos los días le agradecía por amarlo sin tener nada.

Pero no debía, tampoco debía.

~no contiene smut :')

Me Salvaste (l.s)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora