6- ¿Gavi?

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-¿Quién se supone que es imbécil?- preguntó un muchacho de tez morena de nuestra edad aproximadamente

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-¿Quién se supone que es imbécil?- preguntó un muchacho de tez morena de nuestra edad aproximadamente.

-Se refería a ti, que un poco más y nos atropellas a las dos- comentó por el comentario de mi amiga que sigue detrás de mí.

-Ya, sobre eso...- empieza rascándose la nuca de forma nerviosa.- perdón, culpa del conductor.- dice señalando al joven rubio.

Como que me suenan de algo pero no sé bien de que.

- Como recompensa, ¿Qué os parece venir esta noche con nosotros de fiesta?- nos propone

-¿Por qué tendríamos que ir con alguien que no conocemos de nada?- pregunto.

A todo esto, Iria sigue detrás mío, pero con la cabeza asomada para ver a los muchachos.

- Os invitamos a bebida- dice el conductor encogiendo los hombros

- Claro que iremos entonces- contesta mi amiga por las dos.

- Dame tu número y te digo hora y lugar- se lo dije y seguidamente se fueron con el coche.

- ¿Por qué le has dicho que si? No los conocemos de nada Iria. ¿Y si quieren hacer cualquier cosa con nosotras?- Interrogo a mi amiga mientras llegamos a casa.

- Que más da, eran guapos, majos y encima nos invitan a bebidas, si eso salimos corriendo.- contesta mientras saca las llaves del bolso

Entramos a casa y justo me llega el
mensaje del chaval dándome una dirección de una discoteca, supongo, y citándonos a las 22:00.
Tenemos 2 horas para cenar y arreglarnos.

Mientras yo nos preparo una ensalada de pollo con lo poco que nos ha quedado de la comida, Iria se ducha.

Comemos las dos rápido y yo me meto en la ducha. Me peino y me maquillo de manera sutil. Rímel, iluminador y colorete.

Iria se pone un vestido rojo que le llega hasta las rodillas. Escote en pico y de tirantes finos.

Yo opto por un vestido negro ceñido a mi cuerpo, que me llega hasta el muslo junto con mis Martens básicas.

Recogí un poco la habitación y fui a la de Iria a molestarla para ver si acababa pronto.
Acabó de echarse el gloss y di por hecho que había acabado ya que siempre era su último paso del maquillaje.

Tras acabar de ordenar lo que había ensuciado y limpiar de vuelta un poco la habitación, salimos de esta hacia la cocina para que cada una cogiera sus llaves y nos pusimos los accesorios en el espejo del recibidor.

Yo me coloqué los 5 pendientes de oro, el brazalete del mismo material y color en el brazo derecho, las pulseras de siempre, que es una también de oro junto con mi reloj y mi collar con mi letra S.

Iria se puso un par de pendientes plateados, junto sus pulseras plata, el reloj que le regalé por su cumple, que era el mismo que el mio, y su collar finito de plata.

Lo que decía, todo lo contrario.

Bajamos al garaje a por nuestro coche, pusimos la dirección que nos había mandado el moreno por mensaje en el móvil y mientras yo conducía Iria era la que hacía de GPS. Reproducimos música en la radio mientras llegábamos.

ESCALOFRÍOS - Mora
No me quiero casar - Bad Bunny
CORAZÓN DESPEINADO - Rauw Alejandro

Llegamos al sitio donde nos había dicho el chico del coche de esta mañana y aparcamos cerca de este.

Le envié un mensaje preguntándole donde estaba pero tras 10 minutos no obtuve respuesta ninguna.
Nos había mandado la ubicación y la hora pero tampoco nos había dicho como se llamaba ni nada, así que tuvimos que entrar en el Pub e ir a la pista a situarnos un poco.

Al cabo de otros diez minutos me giro para volver a hablar com Iria pero se encontraba con el chaval.

-Ven Scarly, se llama Alejandro- me seguía sonando de algo pero no sabía de que, así que seguí como si nada.

- ¿Como has dicho que te llamabas? - me preguntó él.

- Scarlett pero Iria me llama Scarly- contesté sonriente. El chaval pareció hacer click en su cabeza porque sus ojos se iluminaron tras saber mi nombre

- Scarlett, Iria, venid que os presento a mis amigos - nos dijo agarrando las manos de ambas.

Miré a Iria y ella solo se limitó a encogerse de hombros sonriendo.
Llegamos a la parte de los reservados, dijo su nombre, Alejandro Balde, y el cachas del segurata nos dejó pasar.

- Chicas, ellas son Pedri, Ferran, pero aquí todos le llamamos Ferry, Fermín, Joao y Gavi- ¿Gavi? ¿A caso me había rodeado de futbolistas y ni lo sabía?

-Chicos ellas son Iria y Scarlett- dijo sonriendo- Ya os avisé de que vendrían- ensancha su sonrisa. Pero el último nombrado, el futbolista del casino, levantó la mirada al escuchar mi nombre.

El chico con el que me encontré en mi ciudad me miró fijamente y me mandó una de sus sonrisas.

Iria siguió hablando con el que nos había invitado a este sitio pero yo me quedé colgada, así que me senté en el primer hueco que encontré en aquel reservado. Entre Pedri creo que era y Ferran, o Ferry, yo que se.

El primer nombrado quiso entablar una conversación conmigo, era simpático, me caía bien y eso que solo acababa de conocerlo.

- ¿Y que vas a estudiar este año?- me pregunta

-Comunicación Audiovisual- le contesto

- Tu supongo que te dedicarás al fútbol como la mayoría de aquí. ¿cierto?- pregunto yo esta vez.
Se quedó un poco embobado pero contestó al instante.

-Pensaba que no sabías de fútbol.- dijo nervioso rascándose la nuca

- Y no se, pero conozco al moreno de la esquina- dije señalando al chaval del JD.

- ¿A Gavi? Pero si Gavi para relacionarse con alguien que no sea de la familia necesita años- dice riendo.

- Pues no se- reí de vuelta con él.

Yo creo que el moreno nos escuchó hablar de él ya que en cuanto Ferran se levantó a por bebidas este vino hacia nosotros y se sentó donde estaba su amigo minutos antes.

- De que se trata la conversación?- preguntó algo curioso.

- De ti- contestó el canario.

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Hola, he intentado revisarlo pero si se me escapa alguna falta o algo os pido disculpas.

¿Qué opinais?

Espero que os guste

besooss
~d~

PROMESA | Pablo GaviDonde viven las historias. Descúbrelo ahora