╰»11»ʀᴇᴜɴɪᴏ́ɴ

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El sol había salido en su totalidad, se podía escuchar el sonido del viento y el cantar de las aves

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El sol había salido en su totalidad, se podía escuchar el sonido del viento y el cantar de las aves. Pero no todo iba a estar bien ese día. Tanjiro y ______(t/n) fueron llevados a un lugar llamado "La sede de los cazadores de demonios" ya que serían sometidos a juicio.

─Despierta. Que despiertes. Anda. Oye, oye, ¿me escuchas? ¡Despierta! ¡¡Arriba!! ¿¡¡VAS A DORMIR TODO EL DÍA!!? ¡¡DIJE QUE DESPIERTES YA!!

Uno de los miembros de los kakushi intentaba despertar a Tanjiro y lo logró. Su amiga estaba sentada al lado de él con una cara de amargura y con sus manos atadas detrás de su espalda, era claro que ella no quería estar ahí.

─Vaya, vaya. Escuché que un cazador de demonios llevaba en su espalda a uno. Pensé que sería más extravagante, pero este es solo un niño cualquiera, y esa niña lleva esa cara desde que llegó.

─No soy una niña... ─murmuró para sí misma, así el kakushi no la escuchaba y golpeaba su cabeza de nuevo.

─¡Ha llegado el momento para que juzguemos a estos cazadores! ¿Están listos?

─¿Quienes son estas persona-...

El kakushi no dejó que Tanjiro terminara de hablar porque estampó su cabeza en el suelo de nuevo.

─¡No hables hasta que te digamos que lo hagas! ¿Sabes quienes están frente a ti? Los dos están en presencia de los pilares.

─Yo no debería estar aquí ─______(t/n) miró al kakushi─Ni siquiera sé en donde estamos, y verlos a ellos me incomoda ─ella intentó soltarse de las cuerdas─Excepto Giyu ─lo último lo susurró, por suerte nadie la escuchó.

Algunos de los presentes la miraron con sus ojos entrecerrados por lo que dijo, pero eso ni impidió que otra hablara.

─Es la sede de los cazadores de demonios. Están aquí porque en poco tiempo los pondremos a prueba. ¿Listos, Tanjiro Kamado y _____(t/n) _____(t/a)? ─habló la misma chica de haori de mariposa que estaba en la montaña Natagumo, Shinobu Kocho.

─¿Cómo pretenden que esté lista? ─volvió a murmurar, pero esta vez un poco más alto.

─Antes de empezar la prueba, ¿por qué no les explicamos sobre el crimen del que se les acusa? ─otra voz la interrumpió.

─¡No tenemos que ponerlos a prueba! ─dijo un hombre rubio con puntas rojas, Kyojuro Rengoku─Proteger a un demonio es una violación al código. Nuestra responsabilidad es eliminarlos. ¡Ustedes tendrán que morir con él! ─hablaba de forma animada.

─En ese caso, los decapitaré de una manera especial. Ustedes verán como la sangre cae de una forma dramática. Será todo un espectáculo ─el que hablaba tenía joyas en su cabeza, Tengen Uzui, se veía extravagante.

Una chica de cabello rosado con puntas verdes, Mitsuri Kanroji, veía con lástima a los cazadores, se sentía mal por el hecho de que quieran matarlos.

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