Sweet Scent // Bossnoeul

08

Noeul despertó muy temprano en la mañana. Apenas estaba amaneciendo.

Se talló sus ojos con cansancio y un delicioso aroma invadió sus fosas nasales, se topó con la chaqueta de Boss, la cual estaba entre sus manos y la llevó a su rostro.

Aspiró lo más que pudo y se sonrojó; en verdad le avergonzaba estar haciendo eso y le avergonzó aún más ver la erección que se estaba formando en sus pantalones.

Aún con las mejillas sonrojadas, Noeul bajó sus pantalones por completo junto con su ropa interior y comenzó a frotar un poco su pene.

Noeul tomó entre sus manos la chaqueta de Boss y la puso en su boca, sabía que llegaba a ser muy ruidoso cuando estaba excitado y prefería no despertar a sus madres.

Comenzó a masturbar más su miembro hasta que estuvo completamente duro. Retiró su boca de la chaqueta y lamió dos de sus dedos. No perdió tiempo y se penetró con ambos dígitos, la lubricación natural ayudaba más a que estos entraran fácilmente.

Volvió a morder y llenar de saliva la chaqueta del alfa mientras se penetraba más rápidamente con sus dedos.

A su cabeza llegaron imágenes completamente eróticas y obscenas de Boss tomándolo con fuerza, follándolo, anudándolo, corriéndose dentro de él.

Noeul no aguantó demasiado y se corrió en gran cantidad sobre sus sabanas.

Respirando agitadamente, Noeul se paró de su cama y se metió a su baño para tomar una ducha. Era más que evidente que no podría asistir al colegio durante un par de días, se sintió mal al recordar que no podría presentar su prueba de cálculo para la cual había estudiado mucho junto a Boss.

Se sonrojó al recordar a Boss y una nueva erección se comenzó a formar y su culo a lubricar un poco.

El omega cerró sus ojos y terminó de bañarse rápidamente. Tomó uno de sus supresores y se lo pasó por la garganta, le estaba avergonzado bastante imaginarse a él haciendo cosas obscenas con su Phi.

Se puso un conjunto cómodo y suelto para después bajar a la cocina. Becky se encontraba cocinando el desayuno, Noeul se extrañó un poco, últimamente su mamá pasaba mucho tiempo en la casa.

—Hola bebé, despertaste —dijo la omega apagando la estufa y tomando un plato—. Siéntate, hice el desayuno.

Noeul asintió y se sentó en una silla y esperó a que su mamá le sirviera su desayuno. Se lamió los labios al ver su desayuno favorito en el plato, huevos estrellados con tocino.

—Oye mamá... —dijo Noeul después de masticar.

—¿Sí, Noeul?

—Estás pasando mucho tiempo en casa, no es que me moleste, me encanta, pero ¿por qué?

—Oh... Me di cuenta que pasaba mucho tiempo en el trabajo, más del necesario como para ser la jefa, así que decidí pasar más tiempo con mis amores. Quiero estar aquí para ti Noeul, sé que no te abres mucho y que tal vez sea más complicado hablar con Freen porque es alfa, pero somos tus madres bebé y quiero que confíes en nosotras. Tu mamá se esfuerza mucho para poder entenderte y ayudarte y yo también me quiero esforzar. Prométeme que intentarás confiar más en nosotras por favor.

Noeul sintió como las lágrimas se acumulaban.

—Sí, mamá... Lo intentaré, quiero contarles más sobre... Les prometo que me abriré más con ustedes.

—Oh bebé... —Becky abrazó a su hijo y le acarició el pelo mientras sentía como Noeul lloraba en silencio—. Gracias.

La omega sabía que su hijo tenía algunos problemas de autoestima y se sentía como la peor de todas por no haberlo notado antes. Quería estar mucho más involucrada en la vida de Noeul, quería ayudarlo, quería protegerlo y no se cansaría de hacerlo hasta que alguien llegue a su vida y sea lo suficientemente bueno y capaz de cuidar y amar a su Noeul. Y afortunadamente ya lo había encontrado, su nombre era Boss Chaikamon y podía apostar todo lo que tenía a que ese alfa risueño era la pareja predestinada de Noeul.