Momentos de giyuu y ships

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Esto no podía estarle pasando a ella, ¿por qué? ¿En que se equivoco? Sentía las lágrimas caer por sus mejillas, veía a su omega sonriente junto a aquel hombre de pelo blanco, ojos de color morado, ¿por qué?.... ¿¡POR QUÉ!? Ella se esforzó por todo pero ahora lo perdería...

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AÑOS ATRÁS

Se podía observar a una pequeña ojilila de pelo negro que le llegaba a la mitad de su espalda, se encontraba sonrojada mientras observaba a aquel chico delante de ella, el cual le veía con curiosidad y con un lindo rosa tiñendole las mejillas; incluso cubierto de sangre de  aquellos horrendos seres llamados demonios seguía viéndose bien

—el pelinegro se acerco a kanae ofreciendo su mano para que su compañera de armas se levantará— ¿estas bien?

Kanae tomo la mano de aquel chico, aun no conocía su nombre pero solo asintio

Gracias... Soy kanae kocho, un gusto—aprovecho que aun sostenía su mano y le dio un ligero apretón—

Uh... Giyuu Tomioka... Tambien es un gusto—no esperaba tener tanto tiempo agarrada a su compañera por eso se sonrojo pero más por algo de pena que por el frío—

Lindo nombre—ella sonrio queria elogiarlo pero una voz estrepitosa la interrumpio—

MALDITOS BASTARDOS, OJALÁ SE MUERAN LOS ODIO, MUERAN Y PUDRANSE, ME LOS COMERE Y LO DISFRUTARE—La cabeza de un demonio qué giyuu había decapitado estaba ¿retorciendose? No lo sabían bien pero era una molestia—

Ara~ara~ acaso no te dijeron que meterte en conversaciones ajenas es de mala educación—con una sonrisa y el seño fruncido, kanae aplastó la cabeza de aquel demonio, sorprendiendo a giyuu—

Ambos se miraron por un momento, kanae le sonrio de manera amable a giyuu y luego le giño, a lo cual giyuu solo se dio la vuelta con algo de pena; ambos se encuentran caminado para volver a la cede, por alguna razón que ellos desconocen se sienten bien al lado del otro, kanae estaba fascinada por el omega junto a ella, era tan callado, serio y tímido, pero completamente hermoso.

********Un mes depues********

Ambos pelinegros se encuentraban bajo un árbol de cerezo, sonriendose con cariño geninuo pues hace un mes que empezaron a salir, la alfa era tan agradable para giyuu, pues lo procura, le da algún presente incluso si es pequeño (florecitas) e incluso le dio salmón con daikon; mientras que para kanae el omega es perfecto para ella, es algo callado pero es un buen escucha, su compañía le daba tanta paz, el aveces le daba una carta a mano, con un corazón de papel!!

Kanae... Me quieres? —el ojiazul sabía que su pregunta era estúpida pero sus inseguridades no ayudan—

No—fue directa y cuando se dio cuenta giyuu ya tenía lágrimas en el borde de sus ojos— yo te amo, quererte es un sentimiento muy pequeño como para expresate mi amor

Con cuidado limpio las lagrimas de giyuu y le dio un beso en la mejilla mientras susurraba una disculpa por haberlo asustado, el solo asintio y sonrio mientras tomaba la mano de kanae; ambos eran felices así, en una relación de manita sudada como dirian algunos.

Ambos estaban completamente felices, para tener 17 eran más que maduros en ciertos aspectos, ambos entendian cuando debían partir, yendo a sus misiones o alguna qué otra vez manteniendose separados por estas, pero nunca hubo vacilacion en su amor, pues giyuu siempre necesito que le reafirmen qué lo aman y kanae ama hacerlo, le gusta como es que su omega se sonroja por los halagos o muestras de afecto.