Sanegiyuu

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Quiero hacer un apartado de esos dos como gatos, o sea de las aventuras que tienen xdxd.

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Giyuu Tomioka el joven pilar del agua, es un omega, uno inmaduro a vista de todos pero hay algo que nadie sabe. Desde hace menos de un año empezó a salir con el pilar del viento, no saben como sucedió o por qué pero esta feliz así como esta o bueno, el está feliz.

Se encontraban en una reunión pero no por parte del patrón si no por su compañera beta, Kocho shinobu, al parecer aquella beta los cito para revisarlos y seguir medicandolos. Con disgusto esta ahí, no quiere que vean si cuerpo o lo toquen pero sabe que si no lo hace, la kocho iría hasta su casa y lo atormentaria; suspiro cansado, llamando la atención de la persona a su lado: Kyojuro Rengoku, un alfa puro, en su olor se notaba.

¡Vaya! ¡Amigo tomioka, deberías descansar! —El fuerte sonido de la voz de rengoku llamo la atención de los demás—

"lo haría si no gritaras tanto" —pensó mientras veía a su compañero—

Estar cansado no es nada extravagante tomioka—dijo mientras hacia una rara pose—

"lo único que no es extravagante es ser metiche" —su vista se dirigió a uzui—

Oi, oí, oí, te recuerdo que no eres el único que se cansa, cara de rata—iguro lo señalaba con desdén, estaba parado frente a el—

"Tu tienes la cara peor que el de una rata y yo no te digo nada.... Enano" —tuvo que ver hacia abajo mientras intentaba no reírse pero su cara sería no lo demostraba— "ya me quiero ir"

No bien termino de pensar eso se desconecto de la conversación, realmente solo tenía ganas de irse a su finca, comer, bañarse y dormir... Tal vez acurrucarse un poco con sanemi, si eso suena a un buen plan para el.

Pronto, su turno de pasar llego y como lo supuso, kocho estuvo molestandolo durante todo el rato al igual que diciendole que para ser omega estaba algo pasado de peso, le dijo gordo directamente pero solo la ignoro.

Tomioka-san ojalá tenga suerte y encuentre un alfa, aunque dudo que alguien quiera a un omega como usted—rio un poco recibiendo una mala mirada— ignorar a los demás esta mal, por eso todos te odian

A mi nadie me odia—dicho eso se acomodo sus prendas y salió del cuarto de kocho— "enana malcriada"

Salió del cuarto algo tenso, cosa que notaron los demás quienes curiosos iban a preguntar de no ser porque era el turno de entrar de kanroji y si intentan entrar, lo más probable sería que terminarían peleando con el pilar de la serpiente. Molesto, Giyuu salió de la finca pero no se fue, no podía hasta que reciba sus resultados.

Perdido en sus pensamientos no noto aquella pequeña presencia hasta que sintió dos brazos alrededor de él, giro un poco y sonrio. Tokito Muichiro, un pequeño omega en crecimiento, aun era un cachorro pero ya había tenido su celo, uno forzado; el niño estaba restregando su nariz contra la espalda de giyuu y este librandose un poco se dio la vuelta y abrazo al cachorro.

Sucede algo tokito? —acaricio la cabeza del menor—

Hmm—coloco su cabeza en el pecho del omega mayor—

Una ligera y linda risa escapó de los labios de giyuu, hace tiempo que el joven prodigio empezó a hacer eso, claro que Giyuu lo permite pues es solo un cachorro que aun busca el cuidado y amor de una madre, y el no es quien para negarselo.

Momentos de giyuu y shipsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora