ENSÉÑAME A AMAR. (SUPERCORP )

Capítulo 11

Después de una hora de estar acompañando a Lexie hacer sus rondas, Kara pudo, Al fin, convencer a Lexie de que debía irse a casa.

"Necesito hacer algunas cosas porque no sé cuándo exactamente vuelva Imra y quiero tener todo listo antes" Le había dicho la Rubia a su hermanita.

Kara se despidió de su hermana, Quien la acompañó hasta el hall. La escritora esperó a que Lexie se fuese para volver a tomar el ascensor y dirigirse, al fin, Al consultorio de Jo Wilson. La joven cirujana la recibió con una sonrisa y luego le invitó un café. Ambas charlaron unos minutos sobre la situación de Alex y después Jo le dió indicaciones para que Kara encontrase al psiquiatra de su hermana.

Luego de merodear el tercer piso mientras rogaba no cruzarse con Lexie, Kara dió con el consultorio del psiquiatra. Para su sorpresa no fue él quién la atendió al abrir la puerta sino que la profesora fue recibida por una colega del psiquiatra. La doctora en psiquiatría, Kelly Olsen. La mujer morena le explicó a Kara que el doctor no regresaría hasta dentro de uno o dos meses ya que había pedido licencia por salud.

Preocupada, Kara le comentó a Olsen lo importante que es que su hermana reciba ayuda. Le explicó que Alex se había internado por decisión propia y que ella se había enterado hace muy poco, le dijo en qué clínica está y que no se la dejaron ver ni podría hacerlo hasta no presentarse con una orden del doctor Philips.

Olsen le prometió comunicarse con el doctor y talvez ella misma podría hacerse cargo del caso de Alex. Le explicó que como primer paso esta el hecho de sacarla de aquella institución mental ya que para Olsen, ésta no es tan buena como se pensaba. Olsen no quiso entrar en detalles del porque de esas palabras pero le aseguró ayudarle en cuanto tuviera el permiso de Philips.

Kara se quedó un poco más tranquila, aunque ya no veía la hora de poder abrazar y sacar a Alex de allí.

Kara decidió volver al consultorio de Wilson para contarle lo que había hablado con Olsen y para merendar con su amiga, ya que la doctora había tomado una pausa.

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Esa tarde Lena trabajó más de lo habitual, porque las reuniones que había cancelado en cuanto sucedió el accidente de Lizzie debían llevarse a cabo en algún momento y ese momento fue aquella tarde.

Después de un ajetreado día lena había decidido volver a pasar por la clínica. La verdad es que luego de la llamada con su madre, en la mañana, su humor estaba infumable. Lena sintió que ni siquiera podría estar tranquila visitando a su hermana en la clínica. Por raro que suene, la hora o horas que pasaba a ver a Lizzie, era su "momento de paz", aunque la verdadera sensación de paz va a sentirla cuando Lizzie vuelva a casa.

Luego de estar un rato con Lizzie, Lena se despidió de su hermana dándole un beso en la frente y luego pasó a ver a Addison en su consultorio.

La cirujana había estado muy ocupada y ya ni siquiera iba a su casa; Sino que dormía en el hotel cerca de la clínica. A pesar de ya no estar en el caso de Lizzie, Addison no quiere alejarse y delegarle totalmente su parte a su colega.

Lena llamó a la puerta y Addison la recibió con una sonrisa seguida de un tierno abrazo. Addison se aferró a Lena lo más que pudo y aspiró su olor dulce y característico a vainilla y canela dado por el costoso y glamoroso perfume "Alexandria II" de Xerjoff. Lena supo en ese instante lo cansada y sensible que su mujer se siente.

La ojiverde le dió un beso en el cuello a Addison y ésta sonrió, aferrándose aún más a Lena.

"Te amo" le susurró al oído la empresaria.

Addison deshizo el abrazo y luego puso sus manos sobre las mejillas de Lena.

-Addi... -alcanzó a murmurar Lena antes de que Addison la besara. Fue un beso lento y pronto Lena sintió un gusto salado, provocado por las lágrimas de la cirujana. Addison detuvo el beso y Lena le limpió sus mejillas. - no puedo verte así mi amor. -reconoció Luthor.
Lena no apartó sus manos de las mejillas de Addison, ya que la cirujana seguía llorando y sus mejillas se empapaban de lágrimas. - Estás muy agotada, amor, vamos a casa, a casa no al hotel. -le aclaró. Lena enmarcó una ceja y Addison le dió un beso en su mejilla para luego regalarle una media sonrisa.