9

497 64 51
                                    

Por más que había dicho que no iba a volver a hablar del tema y no siquiera iba a pensar en eso nunca más en la vida, no pudo evitar que si mente se estuviera distrayendo con ese pequeño episodio de locura que había tenido.

Porque nadie en sus cabales hacía lo que él había hecho con Jongho...

San iba a su lado hablando de lo harto que estaba de ese chico con quién Wooyoung estaba saliendo porque según él era un tonto de primera, a quien sólo le faltaba que se le escurriera la saliva para demostrar que más tonto no podía ser.

Yeosang estuvo prestando atención por un momento, molestando al pelinegro al decirle que estaba celoso y que por eso actuaba así, porque si por él fuera ninguno tendría novio y así no tendrían más remedio que estar recurriendo a su "ayuda" constantemente. Por supuesto que no mencionó el hecho de que a él no le había importado tener novio porque de todas formas había acudido por su "ayuda".

El problema era que el viaje en bus se le estaba haciendo mucho más largo de lo debido porque Wooyoung se había hartado y tomando el auto de San, se fue solo dejándolos a ellos a cargo del curso, algo que según él era lo que correspondía porque Yeosang no había ayudado en nada.

No pudo contradecirlo.

El punto era que su cabeza estaba tan revuelta y con tanta culpabilidad (algo que antes no había sentido con tanta fuerza) no solo porque lo que había hecho con Jongho había estado mal, sino también porque tuvo que ser firme con el menor al hacerle entender que nada volvería a pasar entre ellos y que, aunque el moreno no lo creyera, lo que sentía si era unilateral.

El grupo de chicos estaban en su gran mayoría metidos en el agua, luchando con las olas tratando de demostrar quien era el mar fuerte. Las mujeres les daban ánimos desde afuera y las más valientes estaban junto con ellos.

Yeosang en un acto responsable (y casi bajo amenaza por la mirada de Wooyoung) se ofreció a cuidarlos de que no hicieran algo peligroso y terminaran haciendo algo estúpido: como morir.

San había llegado apenas unos minutos después y ambos se sentaron en la arena a mirar a aquellos adolescentes disfrutando del paseo.

Yeosang había notado la como la cara de Jongho cambió radicalmente cuando vio a San allí, al parecer el menor sabía perfectamente lo que había pasado la noche anterior entre ellos dos, aún cuando nadie los hubiera visto.

— Profesor...— Yeosang cerró los ojos un momento,suspirando — ¿Podría hablar con usted un momento?

— Tendrás que ser más específico, Choi. — Respondió San.  Porque aquí habemos dos.

Yeosang abrió los ojos para hacerle una mueca de exasperación a San, a veces su amigo era muy pesado sin necesidad de serlo, es decir, era bastante obvio que era con él con quién Jongho quería hablar.

— Profesor, Kang. — Siguió el menor. — ¿Podríamos hablar un momento?

— Estoy al cuidado del grupo en este momento, Choi. — Respondió Yeosang sintiéndose nervioso por causa de esa conversación que él definitivamente no quería tener.

— Ah pero no se corten. — Volvió a intervenir el pelinegro. Pueden hablar con tranquilidad aquí.

-— No se ofenda, profesor Choi, pero es un tema privado y preferiría...

— Mira esto. — Lo interrumpió sacando unos audífonos de su bolsillo-. — Yo voy a estar escuchando música y ustedes pueden hablar en paz.  Sonrió triunfante.

El Alumno Favorito [JongSang]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora