Para el hombre más fuerte se veía hermosa, la sombra de sus ojos era linda pero sutil de un color azul claro, sus labios tienen un labial que no brilla de color rojo, tal vez sea mate pero mucho del asunto no sabe.
Solo sabe que es muy linda.
- hola...
Su voz salió débil, como si hubiera suspirando en cada espacio de las letras, no era su intención claramente pero así le salió obviamente se disculpo al segundo, haciendo que la chica se ría un poquito por los nervios que tienen... ¿De verdad, había caído tan rápido en sus brazos?.
- hola, traje algo de guiso que me sobró, no sé si te gusta pero-
- no no, me encanta el guiso de kimchi... Después del ramen.
La respuesta que le dio la chica encendió las alarmas de su corazón, era perfecta, es perfecta.
- oh, se hacer un ramen muy bueno, al menos eso dicen mí amigos y mis padres cada vez que los visito.
Era linda, tenía un pelo hermoso, él la pasaba en altura y encima de todo eso, sabía hacer ramen bien... ¿Sería este su ser predestinado?.
- ¿Wonho? ¿Estás bien?...
Su nombre de artista hizo que saliera de sus pensamientos y vuelva al mundo real, en ese momento respondió con un "si" y dejo que al fin la muchacha pasara a su hogar.
El sitio era de los más acogedora.
La cocina tenía un pequeña isla, la sala tenía el comedor en el mismo lugar junto a un televisor en una esquina la cual a unos centímetros había una marco que daba a un pasillo horizontal, en ese punto la visón de la maquilladora quedó sin mucho más que ver.- Linda casa.
El artista sonrió ante ese comentario y luego se acerco a ella para sacar el guiso de sus manos y llevarlo a cocina.
En ese pequeño pase de manos, sin querer se rozaron y él pudo ver cómo la chica se sonrojó levemente, haciendo de su rostro aún más bonito si cabe la posibilidad.Lo que no sabía el es que internamente, Seoyeon se estaba maldiciendo por ser tan... Ingenua.
- y dime, ¿Cómo llegaste?
Escuchó ella por parte de Wonho, él estaba en la cocina así que su voz era alta por la distancia entre la cocina y la sala comedor.
- oh, llegue gracias al bus amarillo, me dejó en Gangnam y luego solo fui preguntando a las personas.
Un sonido de algo abriéndose se escucho que al segundo paso a ser algo cerrándose, seguramente fuera la heladera de la cocina.
- me hubieras mandado un mensaje para que te pase la dirección.
La cara de la chica se giró hacia la cocina, viendo cómo el ídol ya venía hacia la sala.
- ¿Y molestarlo? Eso no estaría bien.
Ella vio como se sentó al fin en el sofá, viendo cómo alzó el codo para apoyarse en el cabezal del sofá.
- no me hubiera molestado, ¿y si te pasaba algo? Se que Corea es muy segura pero aún así no me gustaría que a mí mejor maquilladora le pasará algo por culpa de algún loco.
La cabeza la bajo hacia el sofá y sus manos empezaron a jugar entre si con sus dedos, Seoyeon estaba demostrando modestia porque la verdad no podía creer que se preocupe por ella.
- no... No hace falta que se preocupe por mí.
- y no hace falta que seas formal conmigo, no estás en el trabajo para traerme así.
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tras bastidores.
Fanfictionun artista y una staff, una maquilladora y un ídol... En público, ambos se tratan como amigos. En privado, se dicen lo mucho que se aman entre las sábanas. Una relación que por el bien de la carrera de ambos, debe ser a puertas cerradas pero que le...