Capítulo 5: ❄The more that you say, the less I know❄

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Catra ya estaba lista, era una noche más fría de lo que creía, o simplemente era noche y estaba fuera y no bajo el calor de la fogata de la casa, de todas maneras estaba emocionada por lo que vendría. No es mucho de hacer amigos, en el trabajo no habla con muchos de sus compañeros, y prefiere no hablar más de lo necesario con los autores con los que trabaja, y la mayoría de las veces sus conversaciones suceden en las notas de los documentos, correos, o videollamadas.

Scorpia es de hecho una de sus pocas amigas, se conocieron en la Universidad, tenían una materia tronco juntas, y Scorpia a pesar de ser muy buena, no todos se sienten cómodos con ella a su alrededor, y así terminó sentándose a su lado, y poco a poco se hicieron las amigas que son ahora. Catra a veces cree que su vida es como es gracias a Scorpia. Por ejemplo, ella no estaría en esa cabaña esperando para ir a una de las actividades más cliché si no fuera por Scorpia.

Catra acomoda uno de los mechones rizados de su cabello que se escapó por culpa de una rafaga de viento. Desde el porche puede ver la sombra de Adora navegando de un lado a otro de su casa, y aunque Catra odia la impuntualidad y se acerca la hora que acordaron, no piensa molestar a la rubia. No son las mejores amigas, pero esta noche pueden fingir que lo son.

Adora sale de su cabaña apagando la luz de la cocina y dejando al perro sentado enfrente de la puerta, puede ver que le dice algo al perro antes de salir. De inmediato se ven.

La rubia camina por el pasillo de piedras que la guía hacia su cabaña. Y si Catra no supiera que no son algo así como rivales ella estaría en medio de un gay panic. Adora lleva un abrigo y sus manos están resguardadas en los bolsillos, lleva un beanie rojo y su cabello ahora suelto sale desordenado por los bordes, lleva una bufanda del mismo color que rodea su cuello.

—Hey, Adora. —saluda primero mientras baja del porche para encontrar a la rubia.

—Hola, Catra —le regresa el saludo con una sonrisa— ¿Estás lista? Podemos ir en mi camioneta, si quieres.

—Por mi esta bien, confio que no me matarás en el camino. —Dijo mientras empezaron a caminar hacía el vehículo a unos metros.

—No vale la pena. —Catra la miró ofendida ante lo que ella cree que es una broma, y la sonrisa de Adora lo confirma.

—Eso crees.

—A menos que seas tú la que me quiera matar.

—Si conduces no puedo arriesgarme, tonta. —Adora no supo cómo responder a eso, pero no fue necesario cuando estaban a un par de pasos. La rubia desbloqueo los seguros y abrió la puerta de copiloto para Catra—. Gracias.

—No hay de que. —Adora cerró la puerta antes de rodear el auto y subirse en su puesto —. Entonces Scorpia... —dijo adora tratando de no meterse en un silencio incómodo mientras encendía el auto y comenzaba a salir del lugar donde estaba estacionada para meterse en la ruta.

—¿Qué pasó con ella?

—¿Cómo se conocieron?

—Oh. —se rió—. Es la historia más aburrida y común.

—No hay nada aburrido ni común con Scorpia. —Eso era verdad.

—La conocí en Historia general. Scorpia se había sentado en los primeros asientos, pero algunos se quejaban que no dejaba ver, y sabes como es, la semana siguiente se sentó a mi lado, me pidió un lápiz y al día siguiente tenía galletas en mi mesa. Después de eso empezamos a hablar un poco, y luego me esperaba hasta que terminara de guardar mis cosas, y en algún momento empezamos a vernos fuera de la universidad y mandarnos mensajes, y en algún momento solo acepté que era mi mejor amiga.

Under The Mistletoe || Español || CatradoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora