° ~ [ Un Poco De Paz ] ~ ° // El Origen De Los Guardianes //

XIV

Aquellas luces en el cielo forjaron su presencia ante su colorida iluminación, contrastes tan brillantes que resultaría en algo imposible de no verlo, de no levantar tu mirada al cielo, ¿Cómo poder tener la capacidad de evitar observar aquella maravilla?
Con ayuda de esa lógica, ningún integrante de los Guardianes paso su mirada de largo ante aquel llamado. Dos de aquellos se encontraban juntos, aquel que restaba se encontraba separado y lejano debido a una responsabilidad.
Fue así que quienes se encontraban juntos desde el inicio del llamado, llegaron juntos al Polo Norte, el Guardián de los Sueños y la Guardiana de las Memorias.

Conocían el mensaje que brindaba la magnífica aurora boreal, siempre en relación a algo emergente y por ende su presencia en el Polo era más requerida que nunca. Quienes recién habían llegado, esperaban con mucha ansia que se tratara de alguna noticia nueva acerca de Jack Frost, cosa que tuvieron la suerte de ser aquello el tema principal a tratar.

-- ¡Jack!

No fue capaz de contener su emoción al encontrar al espíritu invernal en un estado activo, con ojos abiertos y completamente conciente, por ello que se avalanzó hacía él para brindarle un abrazo.

-- ¡Ah-! Jeje, hola Hada..

-- ¡Ay, Jack! ¡Te habíamos extrañado mucho! ¡Nos hemos preocupado tanto por ti!

No dejaba su boca cerrada ante tanto sentimiento encontrado de alivio, alegría combinado con tristeza, ansiedad y lo que ella necesitaba en esos instantes era un abrazo proveniente del menor, objetivo que fue merecido, así pues con clara obviedad, quien recibía el abrazo corresponde con cariño, agradecido porque ella fuera una quienes más adoraba de sus abrazos fríos.

-- Lo se, l-lo sé, una disculpa por eso..

-- ¡Ay! ¡No lo dije por eso!

-- Je, también lo se, Hada, no te preocupes ya. Ninguno de ustedes, ya estoy bien.

En cuanto fueron llamados, la habitación dejo de verse vacía con sola una precencia, siendo que el albino recibió visitas del resto de la familia, Hada, Sandman y Norte se encontraban en el cuarto, y esperaban también a Conejo, aún así no quizo desaprovechar la oportunidad y el menor intentó disculparse con todos y aclarar que la preocupación no era necesario.
En un intento de mostrarse convincente, mostraba una sonrisa, nuevamente no se trataba de una con su firma, era una sonrisa nada más.

Si bien aquel espíritu pálido dejaba en claro su punto de no ser necesaria la preocupación, con aquella oración hacía oídos sordos, ante la muestra de un esbozó de sonrisa, Norte podía identificar que se esforzaba por mentir, quien además permanecía con su percepción en alerta, con aquella sensación incomoda que rondaba por su estómago y una necesidad de no bajar la guardia. Necesitaba advertirles a sus compañeros, sin embargo era claro que por ese momento debía callar, ese momento debía de permanecer en calma y en felicidad, pues a pesar de la llegada de una mala noticia, venía consigo con una buena noticia, la recuperación de su compañero.

Cómo paso el turno de la soberana, era el turno del más menor en tamaño, el más dormilon, aún así, Hada se sentó en la orilla de la cama para permanecer cercano a Jack, mientras que Sandman procedió a acercarse e iniciar con sus preguntas básicas, pero importantes.

-- Si, me siento mejor..... No me duele nada, es increíble que pueda sanar por mi mismo.

Meme llegó a preguntar sobre su estado físico y a la vez mental, la honestidad se reflejaba en sus respuestas, meramente en lo relacionado a su físico pues en ello si se encontraba bien, hablando de lo mental era preferible no explicar.