Pasillo 10

Capítulo 6

- ¿A dónde fuiste ayer?- preguntó Martin por segunda vez.
- A ningún sitio- murmuró Juanjo.
- Ah, vale, osea que ayer te llamaron, te fuiste sin decir nada, sin decirme a dónde ibas, no respondes mensajes ni de tus amigos, y no te fuiste a ningún lado. - le dijo Martin cabreado.- Estaba preocupado.- Murmuró esta vez. Juanjo lo miró, vió la preocupación en Martin y le dió un abrazo.
- Lo siento, no volverá a ocurrir.- Juanjo se sentía mal por no poder contárselo, Martin se había convertido en uno de sus mejores amigos en muy poco tiempo, y no quería perderlo. Martin se agarró a Juanjo como si lo fuera a perder.

Estuvieron abrazados tanto rato, que al final se durmieron. O por lo menos eso pensaba Martin, que fue el primero en dormirse. Juanjo no podía. Estaba preocupado por él mismo, por Martin. Y su corazón latía a mil por hora. Culpó al estres, pero él sabía que su corazón no latía así de fuerte cuando estaba estresado. Se quedó mirando a Martin un largo rato, lo relajado que parecía, tranquilo, sin preocupaciones. Ojalá el pudiera llegar a ese estado de tranquilidad, pero cada vez estaba más asustado. Él no podía desahogarse con nadie, pero tampoco podía con la carga y con la responsabilidad que su padre ponía ante él. No podía. Su cabeza empezó a dar vueltas, no podía respirar. Se ahogaba. Agitó a Martin mientras dormía para despertarlo, estaba muriéndose, o eso pensaba. Martin se despertó de golpe y vió a Juanjo agarrándose el cuello sin poder respirar.

- Juanjo, ¿Puedes respirar?- Preguntó muy asustado Martin. Juanjo negó con la cabeza.- ¿Te has atragantado?- Juanjo volvió a negar. No podía hablar, estaba muy estresado ya que no podía respirar. Pero Martin reconoció enseguida lo que le pasaba. A él le había pasado más de una vez. Le agarró la mano a Juanjo y se la acarició.
- Juanjo mírame.- le dijo con una voz calmada. Éste lo miró.- Estas teniendo un ataque de ansiedad. No pasa nada, no te vas a morir. Necesito que respires conmigo, ¿vale? Concéntrate en la respiración, no pienses en nada más. Estoy aquí.

Juanjo siguió las respiraciones de Martin, y se centró en cómo este le había cogido la mano. Su piel desprendía chispas, pero él no sabía porque. O sí. Juanjo consiguió respirar con normalidad, y se abrazó a Martin.

- Gracias.- le dijo al borde de las lágrimas.
- No te preocupes. A mí me ha pasado alguna vez. ¿Estas mejor?
- Sí. - respondió Juanjo, abrazándose más fuerte al pequeño.- Gracias.
- Ya me las has dado, no te preocupes.
- No era por eso. Gracias por siempre estar ahí, por no forzarme a explicarte lo que no puedo. Por ser mi amigo. Gracias Martin Urrutia.
- Lo mismo digo Juanjo Bona.

Se miraron a los ojos, y estuvieron así hasta que una alarma los asustó.

Holiss.
He decidido subir otro capítulo corto, ya que respondisteis que preferiais capítulos cortos y más amenudo.
Este capítulo no planeaba subirlo hoy, pero como estoy de exámenes la semana que viene, hasta el finde no podré subir nada, así que es un pequeño adelanto.
Dadle una estrellita si os ha gustado.
Gracias por leer.