XX. Mount Huo Sect

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XX. Mount Huo Sect
el regreso del santo de la espada ardiente

dónde yu feilong muere a manos del demonio celestial solo para regresar como aemond targaryen


"I shine forever among the living and forgottenEven if my body disappears somedayIn the place that disappeared later, the mind remains clear in that placeEven if the whole world turns away from meI have to carry the world on my back and walk right...

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"I shine forever among the living and forgotten
Even if my body disappears someday
In the place that disappeared later, the mind remains clear in that place
Even if the whole world turns away from me
I have to carry the world on my back and walk right
Even if I am buried in a place no one knows about
Build a tombstone
so that my name remains"

-Last Sword Dance; Gwang-il Jo



Una fuerte respiración era lo único que se podia escuchar en el silencioso campo de batalla

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Una fuerte respiración era lo único que se podia escuchar en el silencioso campo de batalla. Un mar de cuerpos, extremidades y sangre era la razón por la que solo un hombre vestido de negro y rojo se encontraba con vida, observando a otro hombre sentado literalmente en una montaña de cuerpos de negro y rojo, y respirando fuertemente.

—Que desafortunado final. —habló la grave voz del demonio sentado como si nada sobre los cuerpos como si estos fueran un trono.— Un poco más y hubiera alcanzado el pico de las artes marciales.

—No me jodas. —escupió el hombre frente a él, apretando su espada, furioso de aquellas palabras tan indiferentes al sufrimiento que causó.

Aquel hombre conocido como Tiānmó, traduciéndose a demonio celestial, había sido capaz de acabar con la secta más poderosa de todos los tiempos. En unos pocos días, la Gran Secta Mount Huo cayó ante las fuerzas numerosas de la Secta Demoniaca y su líder, Tiānmo. No importa cuánto lucharon, el enemigo era mucho más numeroso y no eran exactamente unos debiluchos.

—Eres fuerte, Duodécimo discípulo de la Secta Mount Huo. Un poco más, y hubiera podido alcanzar la cima si no fuera por tu secta.

—¡No hables cuando estás sentado sobre los cuerpos de los discípulos de mi secta! —gritó, y con furia, corrió hacia el inmóvil demonio y fue por su cabeza. El moriría, pero por todos los dioses que traería a ese maldito con el al infierno.

Madness and Greatness Can Both Share a FaceWhere stories live. Discover now