~~~Lexa se adentró en el transbordador y se sentó en uno de los asientos junto a la ventana mientras Miranda programaba las coordenadas en el navegador de abordo, por lo que había dicho, hacia otra instalación de Cerberus en la que el Hombre Ilusorio los esperaba.
La idea no le gustaba demasiado, pero entendía que acompañar a Jacob y a Miranda sería la única forma de salir de aquella estación y, aunque estaba segura de que podría haber acabado con todos los mecas ella sola, de nada habría servido sin ningún transporte con el que poder escapar.
Aún así, no aceptaría trabajar para una organización terrorista que se proclamaba en pro de la humanidad, pero tendría que escuchar lo que el Hombre Ilusorio tuviese qué decir. Al menos, le debía el beneficio de la duda sobre los motivos por los que Cerberus se había tomado tantas molestias en traerla de vuelta a la vida.
— Aún estás a tiempo de quedarte aquí, comandante -insistió Miranda, advirtiendo el dilema interno de la castaña.
Jacob se sentó junto a su jefa y la miró como si no la comprendiera bien del todo.
Sabía lo mucho que a Miranda le importaba El proyecto, el cual se había convertido en un asunto personal para ella, uno en el que había invertido los dos últimos años de su vida, lo que implicaba que Miranda no dejaría que nada se interpusiera entre ella y su objetivo, ni siquiera Lexa, y así lo había demostrado matando a Wilson a sangre fría.
Sin embargo, no dijo nada, dejando que la comandante decidiera una vez más por ella misma lo que quería para su nueva vida.
Lexa soltó un suspiro, apenas audible para Miranda y Jacob, y desvió su mirada hacia la ventana, perdiéndose unos segundos en algún lugar tan lejano como ese oscuro espacio en el que había terminado flotando mientras la Normandía caía al vacío transformada en miles de pedazos.
Por más que lo pensaba no entendía bien cómo sucedía todo.
En su último recuerdo antes del ataque a la Normandía se encontraba con Clarke, viviendo uno de los mejores momentos de su vida.
Habían acabado con el Soberano y, aunque el Consejo no había reconocido oficialmente la amenaza de los Segadores, menos su existencia, seguían trabajando en silencio, desde la sombra, buscando pistas por toda la galaxia que los guiara directamente hasta ellos, mientras se permitía disfrutar de la increíble compañía de la asari.
Pero, unos minutos después y sin saber cómo, las alarmas de la nave sonaban, poniéndolo todo patas arriba. Ni siquiera el sistema de sigilo había evitado que esa nave desconocida detectara a la Normandía y abriera fuego contra ellos, dejándoles sin posibilidad de escapar del ataque.
Quién y porqué era algo que Lexa averiguaría tarde o temprano, por Pressly y todos los oficiales que habían muerto, aunque algo le decía que todo estaba relacionado con el motivo que en primer lugar los había reunido.
Lo único que sabía era que necesitaba encontrar a Clarke y comprobar cómo se encontraba. Con aquella incursión en busca de geth, el temor de la asari de perderla, y superarla para el resto de su larga vida, se hacía real y no podía dejar de pensar en cómo le habría afectado.
Por otra parte, aunque quería confiar en que Jacob no mentía cuando afirmaba que todos los demás se habían salvado, debía comprobarlo con sus propios ojos.
ESTÁS LEYENDO
CLEXA AU --MASS EFFECT 2 --
Science FictionSegunda Parte de ~~CLEXA AU ~~MASS EFFECT ~~ El Soberano ha caído y ahora El Consejo de La Ciudadela tiene que responder ante la evidencia de que los Segadores han vuelto. Para disipar los rumores, el Consejo ha enviado a la comandante Woods y a la...