***Lexa, Zaeed y Miranda volvieron a la superficie de la estación, buscando el transbordador que los llevaría a la zona de cuarentena donde el profesor Mordin Solus se encontraba, tratando de hacer frente a una misteriosa plaga.
El transbordador estaba situado a un lado del Afterlife, pero antes de adentrarse en los suburbios de la estación, Lexa decidió entrar y hablar con Aria.
Tenía algo que a ella le interesaría.
Un turiano llamado Grizz los detuvo al pie de la escalera que accedía al reservado desde el que la asari controlaba todo lo que sucedía en Omega.
— ¿Eres la comandante Woods?
— ¿Quién lo pregunta? -Lexa arqueó una ceja.
— Me llamo Grizz. Aria tiene un trabajo que ofrecer, ¿te apuntas?
— Eso depende de qué tenga Aria en mente -respondió ella.
— Aria se ha enterado de que algunos mercenarios de la Manada Sangrienta planean matar a un viejo conocido suyo. Un krogan conocido como "el Patriarca". A ella le gustaría evitar que sucediera eso.
— ¿Qué problema tiene la Manada Sangrienta con el Patriarca? -se interesó Miranda.
— Si conocéis al Patriarca, sabréis que es incapaz de mantener la maldita boca cerrada. Algunos no aprecian sus historias. Especialmente cuando se sale de la ficción.
— Y ¿qué interés tiene Aria en protegerlo? -preguntó Lexa, recordando la conversación que había mantenido con el Patriarca anteriormente.
— En el pasado, él era uno de sus enemigos más mortales. Ahora Aria conserva todo cuanto queda de él a modo de trofeo. Mientras viva será el ejemplo perfecto de lo que te puede suceder si te enfrentas a ella.
— ¿Por qué has acudido a mi? ¿No basta con los matones habituales de Aria?
— Porque Aria lo dijo. ¿Qué otro motivo quieres? - el turiano se encogió de hombros.
— La gente como Aria no hace las cosas sin una buena razón. Quiero oír cuál es -insistió la castaña.
— Está bien. Pero yo no te he dicho nada ¿Comprendes?
— Comprendo -asintió ella.
Grizz suspiró.
—Si resulta que Aria está protegiendo al Patriarca... bueno, puede verse como una debilidad. Y quizás algunos decidan aprovecharlo. Tú no trabajas para ella, así que tu ayuda solo parece un acto de bondad al azar.
— Está bien. Me encargaré de ésto.
— El Patriarca está abajo, rodeado por sus "fans", seguramente. Ocúltalo hasta que pase la amenaza de los mercenarios. Vuelve cuando acabes y obtendrás lo que mereces.
— Volveré cuando el trabajo esté hecho... -aseguró Lexa subiendo la escalera.
En el reservado, Aria estaba sentada en su asiento habitual rodeada de sus secuaces, pero en esta ocasión, éstos no reaccionaron a su presencia y la dejaron pasar sin ofrecer ningún tipo de resistencia.
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CLEXA AU --MASS EFFECT 2 --
Science FictionSegunda Parte de ~~CLEXA AU ~~MASS EFFECT ~~ El Soberano ha caído y ahora El Consejo de La Ciudadela tiene que responder ante la evidencia de que los Segadores han vuelto. Para disipar los rumores, el Consejo ha enviado a la comandante Woods y a la...