Arlequín (KookV/GiMin/Yoonmin/Sope/Namjin)

IX

—Necesito a JungKook y tú sabes bien en dónde está.

SeokJin elevó la vista y miró a GiYoon quien lucía desesperado, desalineado, sudado, parecía enfurecido, sus ojos demostraban el infierno mismo, dejó de lado el libro que estaba leyendo y mordió su labio inferior. Lo que había aprendido del tiempo que estuvo ahí era la bipolaridad de GiYoon, sus cambios cíclicos de humor, podría estar bien un día y al otro, ser un completo demonio, todos ahí parecían locos, no se sorprendía de ello, pero a diferente de dónde venía, eran más desorganizados e irracionales.

—¿Por qué?

—Necesito encontrarme con él.

—¿Para qué?

—¡No importa para qué, dime dónde está!

—Sabes dónde está, el problema es que no puedes entrar ¿Verdad?

GiYoon rio por lo bajo. —Su guardián, es difícil de burlar, tenemos un reglamento, no puedo hacer lo que quiera, tengo que apegarme a las malditas reglas.

—Sí, es verdad, no puedes entrar en su territorio sin permiso, Niel no le da permiso a nadie—bufó—. Al último al que le dieron permiso fue a Jimin y se hizo un caos. El culto no confía en ti, fue un error trabajar contigo.

—Ya. Lo. Sé—gruñó—. Pero, estás aquí, ¿Que quieres para ayudarme?

—Nada—se encogió de hombros—. Realmente me siento bien, me gusta este lugar, es interesante, me hace bien el aire fresco de hecho.

—Ví a Jimin—dijo con un susurro y la mirada perdida.

SeokJin le observó fijamente. —¿Jimin?

—Él está ganando fuerza, quiere regresar, necesito que regrese.

Tragó en seco, hacía años que no veía a Jimin, relamió sus labios, pensativo, no era una casualidad que Jimin haya aparecido después de tantos años, tenía que ver con el hecho de que Jungkook estaba cerca, pero ¿Por qué? ¿Por qué era su hijo? No, eso no tenía mucho sentido, Jungkook era el único que realmente no había desarrollado un vínculo con Jimin, ya que este había muerto cuando era un recién nacido, debía ser algo mucho más fuerte, observó fijamente al desquiciado que estaba frente a él.

—¿Qué es Jungkook?

GiYoon le observó unos momentos antes de soltar una ligera carcajada. —No se te escapa nada Jinnie.

—Claro que no, durante años, Daniel ha buscado despertar a Jimin, al menos un indicio de que está consciente, pero, nunca funcionó, hemos hecho rituales, sacrificios, llamados, todo es en vano, sin embargo, Jungkookie llegó al Arlequín y Jimin empieza a despertar, debe haber algo especial en tu vástago ¿No? Algo mucho más especial que los demás.

—Eres curioso, pero, eso puede traerte muchos problemas—rio por lo bajo.

—¿Quieres que te ayude? Entonces, dame respuestas.

—Es complicado Jinnie—dijo caminando por el salón, tomando una botella de whisky para servir en un vaso, bebió el contenido de un trago, relamiendo sus labios—. Jungkook es muy especial, él tiene la sangre del infierno—lo miró sobre su hombro—. Planeamos su concepción en un ritual especial, es la clave de todo, su sangre es la llave que abre las puertas del infierno, ahora está ayudando a traer a su padre de vuelta, ¿No es increíble? Desde niño demostró tener una fuerza e inteligencia sobrenatural, una curiosidad y una sed de sangre que se asemeja mucho a la mía, mi quería serpiente del Edén—bufó—. Necesito que Jimin regrese ya, y quiero encontrar a Jungkook antes de que su mente pueda ser corrompida por los de tu tipo.