¡¡Franken Fran no Ken!!

Capitulo 8avo. Padre Fingido

-Parte 1-

Al pasar los días Ken, se llevaba mucho mejor con los Madaraki.

Fran tenía en su mano un sobre color azul con una información bastante triste para después dársela a Kenshiro.

—Ten Ken, para ti, te resumiré su contenido: No hay ningún rastro de esa chica en este mundo (Viendo así a Ken con una mirada seria).

—Ken lamento en serio, hice lo que pude para hallarla, pero ni una pista de ella, parece que Kanae tenía razón en ese aspecto de que está en otro mundo o realidad alterna, aunque soy más una investigadora, estos temas en si son bastante impresionantes.

Kenshiro solo le tocó el hombro y se inclino estando a la altura de Fran, esto lo veían Veronica y Okita, ellos ya sabían sobre Kanae y las otras dimensiones, al principio no lo creían, pensaban que era un disparate de un loco, pero al ver las grabaciones que tenia las cámaras de vigilancia de la mansión, se quedaron estupefactos.

Regresando con Ken y Fran.

—Gracias Fran, yo buscaré a Lucy con mis propios medios, de eso estoy seguro (Habló Ken en un tono determinado).

La pelirubia intuía algo malo así que hablo, aunque esto dejaría boquiabiertos a todos.

—¡Si tú te atreves a irte! Iré contigo en búsqueda de Lucy, está oportunidad de conocer otras realidades, otros mundos, el profesor, no solo eso, cualquier científico mataría por tener este sueño y yo FRAN MADARAKI LO TENGO ENFRENTE MÍO ....

Ken le vociferó algo.

—No Fran, no sabes lo que dices, ¿Que pasa si en donde caigo? Hay peligros (Asustando un poco a Verónica).

—¡No le hagas caso Ken! Mi hermana está algo loca, además si te vas, me sentiría muy sola, bueno un poco, y no es justo, también yo quiero conocer, al ver a esa Lucy, me dio ganas de igual conocerla.

Ambas hermanas discutían, hasta que Ken les tocó el hombro a ambas.

—No las dejaré aún, además hay trabajo que hacer o me equivoco Fran (Vociferó Ken en un tono tranquilo).

—¡Pero aún así! No te dejare ir solo Kenshiro, recuerda ¡Que somos un equipo! Aunque no está Lucy en este mundo, aún hay posibilidades de encontrarla.

Pero una llamada sonaba, el mayordomo de la casa llevaba el teléfono de casa en bandeja de plata.

—Para usted mi señora, y buenos días a ustedes (Vociferó el mayordomo a los presentes).

Fran recibía la bocina del teléfono.

—¡Buenos días!, Fran Madaraki al habla, ¿Con quién tengo el gusto? (Hablaba de una forma educada la pelirubia).

—Oh vaya, un gusto de verle, ¡Dice que un cuerpo no identificado!, ¡Uno de los míos! (Intrigaba a Fran).

—Okita, ¿Hemos perdido a alguien?, o tú Verónica, haz matado a alguien sin que lo sepa yo (Decía Fran mientras tapaba con su mano la bocina del teléfono, del cual Okita vocifera con una negativa respuesta, pero en el caso de Verónica, la ofende pero de igual manera dice lo mismo que Okita).

—Y tu Ken, ¿Haz visto a alguien o algo raro en tu cabaña? (Veia Fran con una mirada seria al guerrero).

Kenshiro vocifera lo mismo que Okita y Verónica.

Fran al saber que sus amigos no hicieron algo malo, sigue con la llamada con el señor Amatsuka.

—Esta bien lo voy a checar, asi que no quiero quejas después si le hago algo (Del cual Fran cuelga la llamada).