Después de la derrota de Muzan, sacrificando la paz que tanto ansiaba el heredero del Hokuto Shin Ken, una puerta de la cual lo trajo al mundo de Nezuko Kamado, ahora lo llevará a un mundo totalmente desconocido.
Espero y que está historia les agrad...
Kenshiro estaba en solitario en su cabaña, en el gran bosque que asolaba la gigantesca mansión de los Madaraki.
El veía como la bina se iba a alguna labor médica, esta vez no pidiéndole alguna ayuda o algo de asistencia.
En el limbo.
-Esa joven se encariño con Ken, me hubiera gustado haberle dejado descendencia (Vociferó con pena Yuria).
Ume estando a lado con ella no sabía lo que era dar hijos, nunca tuvo esa oportunidad siendo mortal, y tampoco cuando fue un demonio despiadado.
Aún así sentía ella que ese guerrero cambiaba a esa familia de excéntricos médicos dementes para bien entre comillas hablando.
De vez en cuando venía Aqua a supervisar a Kenshiro, vociferaba: ¡Velen a mi campeón! , ese hombre destruirá a ese rey demonio, ¡Ya me harté de enviar a puro pusilánime en aquel mundo que custodio.
Para Yuria esto no le preocupaba mucho, ella deseaba que el guerrero tuviera la oportunidad de rehacer su vida, aunque el caos o la violencia misma se entrometieran.
En el caso de Ume, solo sentía repulsión por Aqua, ella siendo una diosa arrogante, podia frenar la ambición de Muzan o salvarle a ella o a su hermano en su momento en donde ellos si necesitaban ayuda desesperadamente.
En aquella dimensión venía de vez en cuando Kanae para pasar el rato, ya no usando su antiguo uniforme, sino ropa de civil, vociferaba que el paraíso era un lugar de ensueño, donde la paz impera ante la crueldad del mundo terrenal.
Aún así ella veía al guerrero, le preocupaba mucho verlo solitario sin nadie con quién hablar, aunque estuvieran los Madaraki, la ex Pilar no confiaba para nada en ellos, que esa chica se guardaba algo malévolo entre manos y razón no le faltaba, ahora Yuria, Ume y Kanae veían que Fran y Madaraki estaban en una gran construcción, parecía una fortaleza.
Vieron las tres como se terminaba destruyendo para que salga una forma amorfa de tentáculos.
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-¡Que diablos es eso! Acaso esa niña no se basta con perturbar a sus pacientes (Habló Kanae con una expresión severa mientras veía desde arriba aquel desastre).
Yuria exclamó.
-No fue ella joven Kanae, fue esa extraña secta, aquí Aqua Sama me envió está información sobre esa extraña congregación, a Fran Madaraki solo la contrataron para curar a una niña que fue cautiva (Entregando varios papeles con imágenes a Kanae, del cual quedaba horrorizada).
Ume a veces se impresionaba de lo inteligente que era Aqua, aunque a veces ella venia ebria del paraíso para venir al Limbo a decir estupideces sin sentido.
-¿Sacamos a Ken de ese mundo? Digo, porque esa chica en vez de beneficio solo provoca caos (Habló Ume mientras veía aquella abominacion volando en el aire).
