Canciones de media noche | Taekook ° kooktae

4: Mixtape y casetes

La noche antes del último partido hui de casa luego de que el restaurante cerrara y me quede sentando en unos de los columpios en el parque que estaba a varias casas de distancia, solía venir de vez en cuando, sobre todo a media noche cuando no había personas alrededor, ahora estar aquí era melancólico porque estaba lleno de recuerdos, cuando era pequeño soñaba con un día salir de esta ciudad, ahora que eso iba a pasar y los días pasaban cada vez más rápido, no estaba seguro si era lo que realmente quería.

Tenía miedo, mucho miedo.

No quería regresar a mi habitación, donde había dos cajas de cartón esperando a ser llenadas con las únicas cosas que podría llevarme, en menos de dos semanas me mudaría a Seúl, al departamento con Jin, algo extraño, luego de lo que paso entre nosotros, terminaría siendo la única persona que conocía y me dejaría quedarme con él.

Y nada parecía que iba a ser fácil.

Todo iba a ser diferente, incluso a la persona que veía a través de mi ventana, Jungkook, el no estaría ahí. Y tal vez era lo que hacía que diera más miedo. Perder a alguien que ni siquiera alguna vez pudo ser tuyo.

Aunque el apareciera como si mi mente lo llamara cada vez que no era un buen momento, lo veo caminar hacia mi dirección, tiene puesta la chamarra del equipo de beisbol y trae consigo una bolsa de plástico, sin pedir permiso se sienta en uno de los columpios vacíos.

—Compre helado, ¿quieres uno?

Acerca una paleta sabor manzana, era mi favorita, luego comienza a mecerse poco a poco.

—El partido es mañana — le digo, y parece un reclamo cuando me doy cuenta —. ¿No deberías de estar dormido?

—¿Debería? — cuestiono—. Es mi último partido, se siente extraño, no podría dormir, aunque lo intentara, mejor salí a caminar, ¿tú no deberías estar dormido también?, mañana debes estar en el partido.

Solté un suspiro, si también debía de estar el partido, pero que la mascota del equipo durmiera temprano por un partido no era tan importante.

—Es extraño, porque es la primera vez que llegan a una final, pero lo harás genial como siempre, habrá cazadores de talento, no dudo que recibas alguna propuesta y que el próximo año no tengas la menor idea de cual elegir.

—No lo creo.

Dijo mientras movía la cabeza en negación, a veces el mismo dudaba de todo lo que podría lograr.

—Lo sé además habrá personas apoyándote

—También estará la mascota del equipo — dice, y luego suelta un suspiro—. No soy tan bueno, los cazadores de talento solo estarán por Eunmin.

Tuerzo la boca apenas escucho su nombre, si era bueno, el mejor de todos, pero era un cretino.

—Por mucho eres mejor que el, que solo se dedica a ya sabes, es el...

—Lanzador, ¿enserio no sabes nada de beisbol?

Niego, durante todo ese tiempo me había forzado a mantener la vista puesta en un punto fijo frente a mí, pero no resistí más, era como si una fuerza invisible me hubiese guiado a que me girase a verlo, solo para darme cuenta de que él me había estado mirando todo el tiempo, en segundos me pierdo en sus ojos que era los cafés más hermosos, y luego sus labios rosados por el frio de su helado, tuve que pasar saliva para dejar de lados mis pensamientos.

—No, no lo es— confese por fin con palabras.

—Ni siquiera porque has sido la mascota del equipo estos últimos años.