Mi querida madre...
No hay suficientes palabras en la tierra para expresar todo el amor y gratitud que siento por ti, desde el momento de mi nacimiento has sido mi brújula.
Tu apoyo increbrantable, tus cuidados y sacrificios todo eso me a modificado y a echo de mi lo que soy hoy. Tu amor siempre a estado presente. Me ayuda a superar lo altibajos de la vida.
En tu presencia siempre encuentro consuelo y Comprensión, tu sabiduría y tus consejos me has enseñado cosas muy importantes sobre la vida, el amor y Resiliencia, tu confianza en mi me a impulsado a ser realmente yo mismo, ha sido mi roca en momentos de incertidumbre, mi mayor fan en mis victorias y mi hombro fuerte cuando me sentía abrumado.
Tu amor es incondicional y sin límites. Siempre has estado allí para escuchar, comprender y brindar consejos de oro que me han orientado por el camino correcto. En cada etapa de mi vida llevo tus enseñanzas y tu amor siempre conmigo...