Solo como amigos (+18) COMPLETO ✅

Capítulo 45 FINAL

Seis años después.

Leah.

Cuando desperté me encontré con los ojos de Abby que eran iguales a los de su padre, su melena rojiza estaba alborotada sobre las almohadas, su hermano dormía al igual que su papá.

—Mami ya quiero desayunar—dijo la pequeña yo.

—Despierta a papá mientras que yo preparo las tortitas que más te gustan si cariño.

Le doy un beso en la coronilla; Salgo del dormitorio y bajo al primer piso.

Abby llego cuando Drake tenía apenas dos años, al principio fue difícil para él adaptarse a que ahora tendría una hermana menor. Con el paso de los días se fue adaptando. Erick le ha hecho prometer que le espantara a todos los niños que quieran acercarse a Abby, idea que no le desagrada a Drake.

<<Ya quiero verlos en unos años>>

—No sé en qué momento me voy a acostumbrar que me despierten a gritos—Erick aparece seguido de los pequeños que corretean alrededor de él.

Me rio cuando lo veo.

—¡Papi! ¡Papi! —Canturreaba Abby alrededor de Erick, su hermano se estaba acomodando en su lugar de la mesa.

—No te rías, —me dice, pero es imposible no hacerlo, se ve tan cansado y eso que apenas es de mañana, —no sabía que las niñas eran tan hiperactivas.

—Pero querías ser papá, ¿no?—le digo sonriente a lo que él me besa.

—Si y no lo cambiaría por nada en el mundo.

—Entonces no te quejes de que tu hija te despierte a gritos—le digo mientras termino de sacar la última tortita.—mejor disfrútala, porque cuando sea mayor no serás su único chico.

—No, no, nada de eso, mi hija tiene prohibido tener novio hasta los cuarenta, ¿verdad nena?

La niña asiente mientras se lleva un bocado a la boca; su padre le acaricia la mejilla.

—Deja de meterme preocupaciones, para que ellos crezcan falta mucho.

Lo miro con cara de ajá sí:

Erick comienza a desayunar tranquilo hasta que Abby habla.

—¡Papiii!— Abby mira a Erick hasta que él se vuelve para mirarla. Me rio al ver que Drake hace un puchero mientras ve a su hermana—Hoy es el día que iremos por nuestro perrito.

Llevan meses pidiendo un perro de mascota desde que Gabo le compro uno a Neithan, ellos han querido uno.

—Tener una mascota es una gran responsabilidad—digo.

—Ya somos niños grandes—habla Drake.

—¿Tú crees?—les pregunta Erick en tono sarcástico, aunque los niños no lo notan, por mi parte le doy un codazo a Erick.

—Sí—responde el niño—tengo seis y mi hermana cuatro.

—No, pues si, todos unos adultos.—Ahogo la carcajada.

—Bueno, bueno vamos a desayunar en tranquilidad y después hablamos de cualquier mascota.

—¡¡Pero mamá!!—reprochan los dos pequeños.

Esa tarde llegó Gabo con su pareja y Neithan el pequeño traía al perro.

Los niños corrían, mientras el canino los seguía.