7. Némesis.

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Pov _____________:

—¿Qué tanto sabes de constelaciones?—pregunte burlona, mirando al cielo azul por lapsos ya que me distraía analizando el ondeaje del viento sobre los pinos. 

—Lo suficiente —respondió a mi lado, con una mano bajo su nuca y los ojos cerrados.

—¿Y entonces por qué estamos aquí desde las dos de la tarde si las constelaciones podemos apreciarlas en la noche? —pregunte burlona, Dipper abrió sus ojos y me miro.

—Porque quería pasar tiempo contigo —se ruborizó.

Contuve una sonrisa y volví a recostarme sobre su pecho, sintiendo los latidos de su corazón, suaves y constantes.

—¿Habías salido con...chicos? —pregunto curioso y reí.

—Si, pero ninguno como tú —confesé con tono bajo, mirando los pinos que querían alcanzar el cielo azul—. Siempre he estado entre el bien y el mal, conocí a un chico que era maldad pura —conté perdiéndome en mis pensamientos—, creí que sería eterno pero cometí un error.

—¿Qué error? —pregunto Dipper.

—Olvidé quién era realmente —mi atención se fue al rudo ondeaje del aire—, y lo que debía hacer.

Sentí el delicado tacto de Dipper en mi mentón, me obligo a mirarle, sus ojos marrones me inspeccionaron con calma, entonces me relajé.

—Todo error, es un aprendizaje —sonrió comprensivo—. No tienes por qué lamentarte.

—Lo sé —afirme, sintiendo el aire más suave—, porque te encontré.

Dipper volvió a ruborizarse, me acerque un poco y él a mi, nuestras respiraciones se mezclaron, tome su mejilla y cuando estábamos por unirnos en un beso romántico. Alguien nos interrumpió.

—¡Chicos!, al fin los encuentro —exclamó un chico regordete, con una camiseta gris, una bermuda beige y una gorra oscura—. ¡Chicas, aquí están!

—¡Soos! —me enderece y Dipper hizo lo mismo, enojado—, ¿qué hac...?

Su pregunta quedo inconclusa cuando aparecieron: Mabel, Stanley, Stanford y Wendy. Cada uno con mochilas de campamento.

—Trajimos muchos snack's —contó Mabel con entusiasmo—, y el tío Stan es bueno contando historias de terror.

Ambos Stan empujaron dos troncos para simular asientos, Wendy dejó caer varios trozos de leña y Mabel encendió un cerillo, lo dejó caer en la leña y la misma empezó con una flama pequeña.

—N-nosotros... —Dipper trato de hablar.

—¿Estaban muy ocupados? —inquirió Wendy con tono pícaro, Dipper se puso rojo de golpe.

—N-no —negó rápidamente—, es solo que...

—¿Estaban en una cita, no? —pregunto Stan mientras tomaba asiento, relajándose—. No creo que a tu novia le moleste convivir con tu familia, ¿o sí?

Stan me miro fijamente, lo miré de regreso con la misma intensidad.

—No, para nada —respondí para gatear hasta uno de los troncos y recargar mi espalda sobre el mismo—. Al contrario, me gustaría escuchar una de sus aclamadas historias.

Stan mantuvo su mirada sobre mí.

—Me agradas, niña —me señaló y tomó variados snack's de una mochila.

Me lanzó una bolsa de bolitas de queso, sonreí y abrí la bolsa. Stanford tomó asiento junto a su hermano, Soos junto a Mabel y Wendy junto a Dipper.

Scary Love 《Dipper Pines y tú》©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora