Yeol ya lo sabe

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- Soo, no te preocupes, tu amigo Jong In me llamó muy temprano, me explico que es lo que pasaba, me alegro de que seas un buen compañero y le ayudes a estudiar, bueno yo solo llamo para decirte que tu padre y yo iremos con tu abuela, es probable que nos quedemos unos días, así que ya sabes en dónde está la llave, no te desveles, ok, te llamo después, diviértete –

Mi madre colgó después de eso, yo mire a In incrédulo – In, ¿Qué fue lo que le dijiste? -

- Bueno supuse que estarían preocupados, así que les dije que te quedaste hasta tarde para ayudarme a estudiar, y que te habías quedado dormido- dijo In con una sonrisa

- Vaya, pues funciono- dije incrédulo

- Soo, que te dijo tu madre-

- Bueno dijo que iban con mi abuela, ella vive lejos, así que solemos quedarnos por lo menos dos semanas- dije sin prestar atención a la expresión de In

- Ahhh, dos semanas, eso quiere decir que, ¿te tengo dos semanas? –

Cuando capte a lo que se refería me ahogue con mi propia saliva y comencé a toser como tonto.

- In, tengo cosas que hacer, mañana tengo que ver a los chicos, es el día en el que nos reunimos, además no me he comunicado con Yeol desde hace días- dije como si nada

- Ah, creo que me estoy poniendo celoso de ese Yeol, siempre quiere saber que estás haciendo o con quien estas- dijo In con un tono molesto

- In, es mi mejor amigo, es obvio que siempre estamos juntos, además está claro que a mi me gustas tú – dije inmediatamente y sonó más coqueto de lo yo pretendía.

- Bueno eso lo entiendo, pero por lo menos hoy te tengo para mí, así que quiero repetir lo que pasó anoche- dijo In mientras me tomaba de la barbilla y me besaba. Yo no pude poner resistencia alguna, así que pasamos toda la mañana haciendo el amor.

- In ya es tarde, mañana en la mañana tengo que ir a ver a los chicos- dije con desgana, quería estar con él más tiempo.

- Entiendo, pero podemos quedarnos una noche más, mañana te llevaré a tu casa y si gustas puedo acercarte al punto de reunión – la mirada de In era tan brillante que no pude decir que no.

- Creo que puede ser de esa manera, además aun no quiero alejarme de ti – dije con un tono melancólico, mientras In me abrazaba y me daba un beso en la mejilla.



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Al día siguiente así fue, In me llevó a casa, pero para mi sorpresa él entró conmigo.

- Espero que no sea una molestia, solo quiero saber como es tu habitación- dijo él con un tono casi suplicante.

- Está bien, vamos- dije indicando que subiera las escaleras.

Un compañero para toda la vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora