¿Es solo un sueño?

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- Soo, como te sientes, dime, ¿te duele mucho? – me pregunto Yeol, acababa de despertar, así que, entre toda la multitud, intentaba hilar mis pensamientos, nada de lo que estaba pasando o de lo que lograba recordar estaba claro, veía el rostro de mis padres junto con el de mis mejores amigos y podía ver el dolor que en él se reflejaba, intentaba comprender lo que decían los doctores, hasta que un dolor en mi pierna derecha hizo que por fin cayera en cuenta de a qué se refería Yeol.

- Ahhh! – grité – ¿Qué es lo que me ha pasado?, ¿Qué tiene mi pierna?, ¿Por qué me duele tanto? – fue lo único que pude decir.

- Hijo, sé que te duele, pero trata de no moverte, tuviste un accidente, el coche en el que ibas con Kim Jong-in chocó contra un poste, al parecer estaban discutiendo cuando esto pasó – mi madre comenzó a decir, en su voz podía notar un dejo de desesperación y enojo, pero lo que más me llamó la atención era el nombre que había mencionado Kim Jong-i, es decir, quien carajos era él y porque yo estaba en su auto.

- Soo, por favor, perdóname, te prometo que siempre voy a hacer todo lo que esté en mis manos para recompensarte todo esto, yo, es decir... me encantaría poder regresar el tiempo, pero sé que no puedo – el único chico al cual no reconocía me decía mientras intentaba pasar por la barrera que habían creado Yeol y Min Seok, supe que lo que estaba diciendo era honesto, pero, aun así, eso no tenía sentido para mí, ya que seguía sin reconocerle. Su desesperación era tal que sentí pena

- Yeol, Seok déjenlo pasar - dije

- Gracias Soo, por favor perdóname - dijo mientras intentaba tomar mi mano, yo quité la mía inmediatamente.

- - oye, no sé a qué te refieres, pero yo, de verdad, no te recuerdo- dije apartando la mirada, se quedó inmóvil sin decir nada

- In, es mejor que te vayas – dijo Seok – lo hagas más difícil –

Escuché claramente sus pasos y como la puerta se cerraba tras de él, después de eso, los doctores comenzaron a examinarme nuevamente, sabía que algo no estaba bien, ya que al parecer no podía recordar mucho. Después de un rato, los doctores se fueron junto con mis padres ya que querían hablar con ellos, en el cuarto solo se quedaron Yeol y Seok,

- ¿Oye, Soo, es verdad que no lo recuerdas? – me pregunto Yeol inmediatamente cuando los adultos salieron de la habitación

- Si, no sé qué es lo que pasó – el hecho de no saber qué es lo que estaba pasando me hizo sentir sumamente extraño, intenté girarme, olvidando que mi pierna estaba en mal estado.

- No, Soo, no te muevas, solo trata de descansar, cuando te sientas listo, responderemos a todas tus dudas – se apresuró a decir Yeol – así que trata de descansar –me quedé en silencio, no sabía si preguntar qué estaba pasando, unos minutos después, entró una enfermera, la cual inyectó algo en mi suero, lo que hizo que me quedara dormido.

No sé cuánto tiempo paso, solo podía ver entre sueños, como entre doctores y enfermeras entraban y salían, me visitaban, también recuerdo ver a mis padres y a mis amigos, sentados a un costado de mi cama, espera volver a ver a el chico que me pidió perdón con tanta culpa tanto en su rostro como en su voz, pero nunca apareció.

Conforme pasaron los días, los médicos iban reduciendo los medicamentos, por lo cual yo ya no dormía tanto, la preocupación por aquél que no lograba recordar se fue desvaneciendo, y después de lo que pareció una eternidad, los médicos me dieron de alta, a pesar de que pregunte innumerables veces por aquel accidente que me había dejado en tales condiciones, solo se limitaban a decir que alguien se había ofrecido llevarme y en el transcurso del camino, ocurrió el accidente, así que no me atreví a preguntar más sobre el tema.

Un compañero para toda la vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora