Capítulo 23. Algodón de azúcar.

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En varias expresiones de diversión Jungkook sentía como si sus celos hacia el alcalde Min, no hubieran surgido, además que su esposa fielmente respondió con la inocencia que la conoció, era el momento en el que probarían otra atracción haciendo fila, viendo el juego de los autos chocones.

−No se conducir. −Concluye ___, a lo que Jungkook ríe− ¿Y si chocamos?

−La atracción se llama autos chocones, pequeña. No hay problema, que choques. −Señala Jungkook la atracción donde cada impacto causa una risa de quien lo juega− Vez. ¿Te gustaría intentarlo?

−Si, por favor.

−Bien, tu serás quien conduzca.

− ¿Cómo?

Llegando al principio de la fila es uno de los cochecitos en lo que Jimin invita a los esposos aguardar asiento, siendo ___ que apenas pone atención a las instrucciones para cuando hace el carrito avanzar haciendo del impacto con uno de los muros, lo que sacude a ambos, Jungkook que sobre puso una mano al volante para que no se golpeara su esposa, piensa que fue demasiado, pero grande era la sonrisa de su esposa, lo que concluye a clara diversión.

− ¿Estas bien?

− ¡Sí! ¿Puedo intentarlo otra vez?

Jungkook asiente viendo a su esposa manejar el carrito que recibe varios impactos, haciendo una hermosa escena en la que cada impacto saca una de sus mejores risas, escuchando ___ la risa de Jungkook como una apenas escandalosa, siendo el mismo Jimin se sorprenda al ver a su amigo de la misma generación de tal modo, o inclusive que disfrute del matrimonio con su esposa.

Concluyendo con aquella atracción, llegaba ahora las bandas de música solicitadas por Seok Jin, en música lenta en la que un divertido Jungkook invita a su esposa. En la que ambos se abrazan para sentir la música lenta y armoniosa calmar sus corazones agitados.

−Me alegra que la señorita Jeon, sonría tanto.

−Es porque, el señor Jeon me hace muy feliz.

En un juego de nombrarse con el apellido que comparten, siguen su propio ritmo, siendo ___ quien se recargue en el pecho de su esposo y para Jungkook la bonita cercanía haciendo de este día que no termine.

Aun pasando de la banda de música clásica, van en las cortas atracciones de una galería de pintura y la de un pequeño corral con animales de granja, concluyendo con un algodón de azúcar que de nuevo experimenta ___.

Viendo a su esposo comer tan chistosamente igual a un dulce conejito, expresando como alguna vez su esposo con un.

−Que dulce.

− ¿Hmm? Más bien, empalagoso.

___ sentía calientito su corazón, reconociendo la misma expresión que cuando comieron comida rápida por primera vez, aun acabando el festival donde cada señorita del club silvestre festeja por la gran colecta de comida, se dirigen al auto, en una sonrisa silenciosa que ellos saben lo que significa.

− ¿Aun quieres asistir en la cena de esta noche?

−Sí, por favor. ¿Crees que este el mismo concierto? −Pregunta ella con emoción− La música que hacían con esos instrumentos fue tan bella. ¿Podemos bailar de nuevo?

−Claro que sí.

Jungkook se acerca para besar la mejilla de su esposa, aquella que se ruboriza desde su asiento, aun en camino a casa para cambiarse de ropa a una más formal, es Jungkook quien termina estacionando el auto, siendo ___ quien toma de nuevo la valentía para dejar un pequeño beso en la mejilla de Jungkook.

−Te quiero, Jungkook.

−Yo más, ___.

Bajando del auto ambos entrar a la casa para tener que cambiarse cada en su habitación, tomándose el tiempo para prepararse, es ___ quien se pone un vestido blanco con estampados, negros y florales, con tan solo verse en el espejo cepillando su cabello, de nuevo trataba de seguir las recomendaciones que alguna vez le dio Jin, hubiera gustado que hubiera encontrado su pasador con el bello vestido que tiene puesto.

− ¿Estás lista, ___?

___, se mira por ultima vez en el espejo segura de verse muy bonita, toma un pequeño bolso para recordar en los cajones que tiene el reloj que esperaba darle a Jungkook, aun pensando en las palabras de Jenny las deja pasar para salir e ir escalera abajo, viendo a su esposo en un traje blanco y su corbata favorita.

Jungkook hace crecer a su sonrisa al ver a su esposa, a quien recibe con una mano para que baje las escaleras, la veía como una princesita con el vestido largo y los guantes.

−Te ves hermosa.

−Gracias, igual te vez muy lindo.

Lindo, lo escuchaba Jungkook como la palabra más dulce que podía escuchar.

___ estira su mano para mostrarle la cajita terciopelada, tomándolo como sorpresa a Jungkook al tomarla y ver el hermoso reloj, mismo que alguna vez vio en la relojería ahora lo tenía. Aquel no tiene palabras toma el reloj para ponérselo y verlo en su muñeca.

No bastaban las palabras para cuando se acerca a su esposa, para darle un beso en los labios. Siendo ___ quien ríe, agradeciendo que lleva puesto brillo labial.

−Jungkook, llegaremos tarde.

− ¿Y si mejor no vamos a la fiesta? ¿Si nos quedamos los dos en la sala?

−Jungkook.

−Quiero estar completamente cerca contigo, olvidemos esta fiesta.

La cuerda en la relación con sus gantes recarga la palma de su mano en la mejilla de Jungkook, negando sonriente en tal propuesta después de prometer que asistirían. Aun Así, Jungkook juega con ella abrazándola, alzándola un poco para no dejarla salir, sabiendo que le costaran largo minutos antes de que puedan salir.

En el campo Silvestre de mala gana la servidumbre de uno de los Jeon se encarga de los preparativos, con su señora Jenny que hace lo posible para hacer de esta velada inolvidable y podía recibir las miradas de cada uno de los invitados que murmuraban con una sonrisa.

Veían a la esposa de Jeon Taehyung, como la más aclamada en la ciudad, de convertirse en la afortunada hija adoptiva de un dotor como el señor Chul y ahora actualmente esposa de uno de los herederos del banco Jeon, veían a la chica como una recatada y respetable, de una imagen notable a la elegancia.

Ahora lucia un vestido rojo de lentejuelas, maquillada hasta las narices, en una bella sonrisa de pintalabios rojos, haciendo de una gran cantidad de servidumbre servirle para la futura subasta de beneficencia.

Ahora lucia un vestido rojo de lentejuelas, maquillada hasta las narices, en una bella sonrisa de pintalabios rojos, haciendo de una gran cantidad de servidumbre servirle para la futura subasta de beneficencia

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Modo retro. [👔] Jungkook y tú.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora