Capítulo 4. Hamburguesa.

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Eran pocos los afortunados en la ciudad Retro quien encontraba emparejarse con una señorita del pueblo Aventura, entre ellos existían los únicos extranjeros en el pueblo que acudían a proveer el pueblo, mientras que otros eran oficiales quienes prestaban sus servicios como aguaciles y entre otros por medio de un juego que celebraba la unión de diferentes creencias.

Para una ciudad tan pequeña como Retro, todos conocían la belleza silvestre que podía tener una mujer aventura, desde su apariencia tan femenina y llena de gracia, de una belleza particular hasta ser catalogadas como la mujer perfecta.

Las mujeres actuales de la ciudad Retro siempre eran muy distintas en un mundo en los que pudieran hacer las labores de su hogar con el uso de electrodomésticos, comida de restaurantes y en una crianza en base de niñeras. Mientras que los esposos, teniendo de nuevo la función de denominar en lo laboral, tenían la tarea de cada uno de los gastos y las exigencias de sus esposas.

Era en la ultima semana en la que ___ se había dado cuenta que habían sobrevivido con comida hecha de aquella canasta, entre panes dulces y otras infusiones, en la que viendo su reflejo en el baño se da cuenta que no quedan rastros de aquellas heridas, por lo que decide bajar para cumplir con sus tareas.

Antes del amanecer las esposas aventuras, tenían que hacer sus labores desde prepararse ellas mismas, encargarse de lavar la ropa a mano de su esposo, hacer limpieza de una parte de la casa, hasta llegar hacer el desayuno.

Llegando amanecer un nuevo esposo se levanta en pijama, notando que su canasto ya no se encuentra la ropa sucia, aun teniendo que levantarse, de nuevo sale para ver la puerta de su esposa cerrada, aun sin encontrar la valentía de llamarlo o quizás incomodarla.

Aun armándose de valor, llama tres veces con sus nudillos sin respuesta.

−___. Quería saber si podía hablar un momento contigo...

Sin respuesta Jungkook inhala cansado, al no recibir respuesta. Pero al inhalar recibe de su nariz el aroma de comida, con ello sus oídos escuchan el fuerte estruendo, que lo hace ir corriendo escalera abajo hasta llegar a la cocina, estando ahí se encuentra con un cajón arriba de la estufa abierto, estando sentada en el suelo su esposa, teniendo a su alrededor ollas y sartenes, entre otro utensilio de cocina.

−¡___! ¿Qué ha pasado?

___ había querido dar un vistazo en cada cajón, hasta llegar abrir una de las puertecillas fue tumbada con el peso de cada instrumento de cocina, se había golpeado fuerte el brazo, por lo que sujeta fuerte su muñeca tratando de no llorar por su terrible decisión. Mientras Jungkook se abre camino, en un momento apaga la estufa encendida, teniendo que ver en la sartén huevos revueltos y tocino chamuscado.

−No quería ser incompetente, quería hacerle el desayuno como se debe.

Esperando el fuerte regaño o impacto no llega.

El chico se inclina para tomarla con cuidado, llevándola fuera de todo ese desastre para verla sujetando su mueca mientras evita poner una cara de dolor, ante la angustia de Jungkook piensa en varias alternativas, encontrando única solución.

−Te levantaste temprano para hacer el desayuno, debiste llamarme para ayudarte. −Dice intentando levantar al rostro de la chica para limpiar sus lágrimas− Discúlpame. No suelo cocinar y avente lo demás en un rincón. ¿Te has lastimado?...

Era demasiado como para que pudiera comprender ___, aun cuando el chico intenta tomar su mano izquierda, ella suelta un quejido de dolor, alertando a Jungkook que se ha lastimado, la ayuda a ponerse de pie, teniendo que ayudar a salir la chica de la cocina y tendiendo su chaqueta con la que cubre sus hombros, avisa.

Modo retro. [👔] Jungkook y tú.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora