Un sendero de tulipanes, que eventualmente se mantiene vacío, fue testigo del amor desenfrenado que nació en ese lugar tan peculiar, e especial, con el tiempo fue testigo de un amor que sufría por vencer todas las barreras que el destino levantaba ante ellos.
Un amor que era capaz de romper las barreras más altas, Y sumergirse en las mentiras más piadosas, pero nunca romperse.
Ambos eran primitivos de su amor.
Las profecías, tarde o temprano se cumplen, sin importar cuanto tiempo se tarde en hacerlo.
Y solo el sendero de tulipanes fue testigo de ese gran amor que allí creció, experimentando y cumpliendo una vez más.
La profecía del tulipán.
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Sendero de tulipanes (EN PAUSA)
RomanceArlet una chica alegre, que gracias al destino le ha tocado aprender a soltar, adaptarse a los cambios, que aunque fuesen dolorosos, y dejasen grietas, el destino de igual manera le mejorará sus días con la llegada de esa persona. Emil Marshall, un...