VIII

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Sigo enfermo. Siento que mi salud casi se está volviendo regular con sus períodos de mala salud. Supongo que esta es una realidad del envejecimiento. Como resultado, un capítulo más corto, pero mejor uno corto que ningún capítulo.

Arte de portada: Mystery White Flame

Capítulo 8

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Resultó que el director de Beacon todavía podía luchar a pesar de su edad.

¿Quién podría haberlo adivinado?

Correcto.

Ella lo adivinó.

¡Fácilmente!

Neo maldijo a Roman como un millón de tipos diferentes de idiotas en su cabeza mientras detenía un golpe del bastón y luego esquivaba otro, sintiendo el silbido del aire desplazado sobre su hombro izquierdo. Ella se abalanzó con su espada, pero aunque ella era más rápida, él era más hábil, girándola y desviándola con la gracia de un esgrimista antes de golpear casualmente tres veces su pecho. Su aura se llevó la peor parte mientras se tambaleaba hacia atrás, pero todavía eran tres golpes a cero contra ella, y Neo prefería que fuera al revés.

Pero nooo. Comienza una pelea con un cazador veterano retirado por su arma. Eso tiene sentido. No podían simplemente robar una tienda de armas o algo así; tenía que ser una pieza única. Neo gruñó y miró a Roman, preguntándose por qué no la estaba ayudando.

—...y dije que eso no es un gato. ¡Eso es un burro!

Lisa Lavender se rió y le dedicó una sonrisa a Roman. Él estaba de pie junto a ella, con un codo apoyado sobre su cabeza en un pilar y su rostro cerca del de ella. La periodista no tuvo reparos y de hecho se había colocado un poco más cerca para poder obtener una «entrevista» directamente con el hombre del momento.

En ese mismo momento Neo consideró apuñalarlo en la parte posterior de la cabeza.

O en la entrepierna.

A veces era difícil decir dónde estaba exactamente su cerebro.

—Ya sabes —dijo Ozpin—. Eres una joven talentosa. No es demasiado tarde para cambiar tu vida.

La cabeza de Roman se movió.

—¡Oye! —gritó, abandonando a Lisa. ¡Esa es mi minion!

En serio. ¿Eso fue lo que lo llevó a abrocharse el cinturón y unirse a la pelea? ¿Y qué quiso decir con minion? Neo lo fulminó con una leve mirada y Roman rápidamente modificó su declaración.

—Quiero decir, esa es mi hija adoptiva-secuaz-protegida. No puedes robármela. ¿No sabes que eso es un crimen? —Roman se acercó a Ozpin, sonriendo con confianza—. Bueno, debería... ¡uf!

Se inclinó sobre el bastón de Ozpin.

«¡No tienes arma, idiota!»

Neo nunca había anhelado tanto una voz como en ese momento. La imagen engreída de Roman requería que actuara de ciertas maneras, incluso como un bufón arrogante en ocasiones. ¿Pero acercarse desarmado a un cazador? Ese fue un nuevo mínimo, incluso para él.

Ozpin tiró del bastón enterrado en el estómago de Roman.

No se movió.

—Ejem —Ozpin dio otro tirón brusco. Esta vez, Roman vino con él—. Déjalo ir.

—¿Q-Qué tal lo sueltas? —gruñó Roman, deslizando su mano más arriba del bastón—. Suelta mi arma.

—¿Tu arma? Creo que descubrirás que la Long Memory es mi arma.

𝕋𝕙𝕖 𝕊𝕖𝕔𝕠𝕟𝕕 𝕋𝕠𝕣𝕔𝕙 (𝕋𝕣𝕒𝕕𝕦𝕔𝕚𝕕𝕠) ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora