Volumen 1: Capitulo 18

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Desperté en… eh, ¿soy una murciélago?

Capitulo 18:

Luego, nuevamente junta agua en sus manitas y cuando se disponía a llevarlo a su boca, observa algo extraño en el reflejo borroso del agua turquesa. Mira por unos segundos y luego vuelve a observar para asegurarse de que no está viendo mal.

‘¿Qué es esa cosa negra que se refleja en el agua?’, se pregunta.

‘Tiene rosa y una forma rara. ¿Será un mineral?’

El reflejo del agua se aclara, revelando una figura oscura con ocho patas y pintitas rosas, así como cuatro pares de ojos rojos brillantes.

"Oh... Esto es malo, Eliz", suspira con cansancio.

[Eliz] “¿A qué te refieres, Master?”

Mira unos segundos hacia el agua, sin recibir ninguna respuesta a pesar de haber preguntado. Se da cuenta de lo que significaban las palabras de su ama y de manera inconsciente menciona...

“Definitivamente es malo, muy malo, Master.”

“Esa cosa es fea, gigante y da miedo”, dice cuando escucha las palabras de su guía, sonriendo vagamente.

“No quiero mirar hacia arriba, siento que si lo hago estoy jodida.”

‘Esa cosa sigue quieta y mirándome con todos esos ojos’

‘Tengo que moverme rápido de este lugar o voy a estar literalmente jodida. Para colmo, mi posición es bastante mala, muy mala, estoy dada vuelta y dándole la espalda a un enemigo que me puede acabar en un parpadeo o eso creo’

‘El ser sigue quieto y observándome. Eso lo sé, lo sé porque puedo verlo fácilmente por el reflejo en el agua’, medito.

Mientras no dejaba de pensar en la forma de salir de la situación en la que estaba, este ser se mantenía quieto y sin mover ni un pelo. Observaba con tranquilidad y paciencia a la Murci'. La Murci’ mantenía que si se movía del lugar moriría. Llegó a esa conclusión debido a que no había recibido ningún ataque por parte de la bestia mientras se mantenía completamente inmóvil.

Eliz, la guía, no deja de pensar en formas de poder ayudar a su querida Master, pero por mucho que meditara, no lograba encontrar una forma de ayudarla.

Los segundos pasaron y la situación era la misma. La Murci' no se movía y este ser no atacaba. Mientras más pasaban los segundos, más se reafirmaba la conclusión de que ella no iba a ser atacada hasta que se moviera de su lugar. Era raro, pero creíble. Ella no perdió más tiempo y se decidió. Más bien, entre ambas optaron por una decisión. Esa decisión era moverse de lugar. Tanto la guía como la Master pensaban que seguir quietas no iba a servir de mucho, así que tenía que arriesgarse a moverse.

‘Creo que estoy en desventaja, pero si no me arriesgo nada va a cambiar, no hay opción’, reflexiona.

‘No tengo miedo, después de todo, haré lo posible para sobrevivir y arriesgarse por intentarlo es muestra de que quiero vivir. Además, Eliz está conmigo y ambas concordamos en que algo hay que hacer.’

Luego de meditar con la mirada pegada de todos los ojos de esa bestia, suelta un respiro y cierra los ojos. Se concentra y a gran velocidad sale disparada hacia adelante. Cruza por encima de la ancha laguna y llega hacia el otro lado. Esta era ancha, pero no tanto y para nada profunda. Mientras se movía a su velocidad máxima, un fuerte golpe se escucha detrás de ella. El fuerte golpe se escucha desde donde ella había partido y pedazos de piedras y minerales salen volando hacia adelante y los alrededores.

‘Ohhh, ¿a qué me enfrento?’ Se pregunta.

‘Si todas esas cosas salieron por los aires, entonces es un monstruo con mucha fuerza y velocidad. No tengo ni idea de a lo que me enfrento, después de todo, debe ser mi primera vez enfrentándome a tal ser.’

‘Pues claro que es mi primera vez. A veces sí que digo estupideces.’

Llega al otro lado de la pequeña laguna. Se da vuelta y observa el lugar del que había partido.

“Uh, sí que lo destruyó por completo.”

Su cuerpo tiembla por unos segundos.

“Si me hubiera atrapado su ataque no sé cómo estaría mi cuerpo actualmente.”

Observa cómo el polvo del ataque se dispersa lentamente.

“Mmmm… ¿conque me atacó?”

“No veo nada en el lugar que estaba.”

‘Esto es raro.’

Deja de lado la forma en la que la atacaron y empieza a prestar atención hacia arriba, hacia donde se encontraba la bestia que había visto de puro reflejo en el lago.

“¡Mierda! Es la primera vez que veo una tan grande.”

“Por suerte no tengo aracnofobia, sino ya estaría corriendo y llorando.”

“¡Por Dios, es inmensa!”, menciona entre chirridos, sorprendida.

Eliz también se sorprende por lo que ve; era su primera vez viendo algo así. Ocho patas inmensas y completamente negras con pintitas rosas. Ojos rojos por todo su rostro. Ante tales características, Eliz no puede evitar preguntar con asombro:

“¡Máster, ¿qué es esa bestia?!”.

Escucharla preguntar eso de parte de una guía provoca en la Murci' molestia y asombro al mismo tiempo.

‘¡Buuuuuu!… ¡Buuuuuu!… ¡Buuuuuu!… Me sigue pareciendo raro que una guía no tenga nada de conocimiento sobre dónde nos encontramos parados, pero bueno.’

‘Parece que tengo más conocimiento yo que mi guía.

‘En serio, es súper raro que no conozca lo que es una araña o un dragón, aunque esta araña sea muy diferente y rara, se nota que es una. Por eso no tuve problema para reconocerla ahora que la vi mejor. Sin embargo, su tamaño da mala espina. Comparado a las ratas, esta es un jefe final en todo sentido’

“Eso que ves es una araña y de seguro tiene veneno, o eso creo”, explica la Murci'.

Eliz repite varias veces el nombre de manera curiosa y sorprendida, como si fuera un gran hallazgo histórico o algo por el estilo.

Mientras la Murci' le decía esas palabras, la araña bajaba del techo poco a poco y boca arriba. Una vez llega al suelo se pone boca abajo y su mirada se posa sobre la pobre murciélago que yacía en frente y del otro lado de la laguna.

[Eliz] “Creo que quiere matarte”.

Al oír esas palabras, la Murci' no esconde su rostro que parece decir “No me digas”.

“Sin duda quiere luchar.”

“Y yo que pensaba que esto se podía solucionar pacíficamente… ¡Naaa! Jamás pensé en eso, solo era una broma. Era obvio que iba a luchar con esa araña. Tendré que matarla, no hay de otra. Después de todo, esto se trata de auto superarse siempre, ¿o no?.”

-CONTINUARA-

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