AMOR, AMOR 𝑓𝑡 matias recalt.

V

— ¡Dale Matias, levantá el orto! —Cher aplaudió mientras arreglaba un poco la habitación. — ¡Recalt!

Él se removió en la cama y abrió los ojos lentamente, con su carita hinchada le sonrió a la pelinegra. Ella le tiró una camisa floreada suya a la cara y continuó barriendo. Él se levantó, se rascó el pecho desnudo y bostezó.

— Buen día. —dijo entre bostezos esperando que ella le diga lo mismo. — ¿Qué hora es?

— Tarde, dale andá a lavarte la cara. —juntó la mugre en la pala y la tiró en la basura, él solo la miraba atentamente. — Dale Matias que tenés que ir a grabar y te tengo que maquillar.

Matias soltó un ruido a modo de queja y se acercó a ella para abrazarla por la espalda, aún adormilado y con la voz rasposa. Puso su cabeza en el hombro de la chica y fingió roncar.

— No quierooo.

Las manos de ella acariciaron sus brazos mientras estiraba su cabeza levemente hacia atrás para ponerla sobre la suya mientras rodaba los ojos.

— Dejame dormir un ratito má-

Habló él antes de ahogarse con su propia saliva, despabilándolo al instante. Cher se rió y después lo auxilió dándole golpes suavecitos en la espalda hasta que se calmó y le agradeció antes de irse al baño.

(...)

La pelinegra se encontraba maquillando a Blas, casi terminando, cuando el mejor amigo pasó por la puerta. Blas y ella se giraron a verlo una vez terminó de maquillarlo y el ruloso salió del camerino. Aparte, ahí estaba Felipe riendo al lado de Juani, que pararon cuando lo vieron llegar y sentarse en la silla donde estaba antes Blas.

— Poneme linda, dale.

La chica se rió por su comentario y le puso unas hebillas en el pelo para sacarselo de la cara por lo largo que estaba. Pipe y Juani se miraron entre sí y saludaron a Cher antes de irse.

Ella siguió con su trabajo, poniendo un poco de látex en la nariz de Matias para simular la piel pelándose por las quemaduras del sol. Él solamente la miraba y estudiaba cada movimiento que hacía, cada que volvía al tocador a buscar un poco de bronzer y alguna que otra brocha.

Maquillar a Matias era remarla en dulce de leche, no se quedaba quieto. Cada tanto ella le pedía que guardara el celular y no la grabara más para poder terminar de una vez. La situación continuó hasta que ella se cansó y le arrebató el celular para ponerlo arriba del tocador, lejos de él.

Con un puchero se quejó pero no dijo más nada, la pelinegra estaba concentrada en mezclar las sombras y él estaba concentrado en ella. Unos minutos después ella se puso a pintarle la boca, pero él no se lo permitió ya que le agarró la cara y le plantó un beso.

— Matias... —susurró la maquillista sorprendida, no podía creer lo que había hecho pero mantuvo la calma. — Ahora te voy a tener que pintar la boca de vuelta.

— Uno más y me pintas. —respondió haciendo piquito pero ella negó. — Daaale, uno más, no seas gila.

La pelinegra finalmente sonrió y le dejó un casto beso, bastante corto, en la boca antes de arreglarsela así como si el frío se los hubiese cortado.

Después de la sesión los dos fueron al set, esperando que empezaran a rodar de una vez, aunque realmente estaban esperando a Matias que era el único que no había llegado a horario. Él salió corriendo a escena y se acomodó mientras ella lo miraba y se sentaba al lado de Alfonsina, que también miraba ya que no la precisaban en escena.

— Hola Sina. —habló la pelinegra mientras le extendía la mano. — Soy Cher, te maquillé hace un par de días.

— ¿Cómo no me voy a acordar de vos? —sonrió la castaña y le aceptó la mano. — ¿Cómo estás?

— Muy bien por suerte, ¿Vos? Estoy re contenta de estár acá, no pasé el casting pero al menos tengo el lujo de ver como graban.

— No me digas... Bueno, ya va a venir la oportunidad, linda. —Alfonsina volvió su mirada al frente al oír su nombre. — Después hablamos Chersi.

— Dale Sina.

Cher vió como la castaña se iba y se puso los auriculares mientras suspiraba. En el fondo creía injusto no haber quedado pero de igual forma no cambiaría nada del cast actual.

Al desbloquear su teléfono se encontró con mensajes en el grupo que tenían los chicos del cast con ella -porque era amiga de Matias- que decían que a la noche iba a haber una jodita en la habitación de Juani y Esteban. Mandó un sticker que Juani vió antes de empezar a grabar y respondió con un "VAMOOO".

Después del rodaje los chicos volvieron cansados al hotel, algunos fueron directo a entrenar y otros a descansar un rato como Blas y Mati, que se sentaron en el balcón de la habitación del mayor de ellos a hablar en las reposeras.

Matias prendió un cigarrillo que había armado mientras Polidori lo miraba atentamente y pensaba que preguntarle para sacar conversación a pesar de que el silencio no era nada incómodo.

— ¿Y, Mati? ¿Qué onda con Cher? —preguntó removiéndose en su sillón—.

— ¿Qué onda con qué?

— Dale, boludo. —Mati expulsó el humo y miró al pelinegro. — ¿Están saliendo?

El mayor negó y siguió dándole caladas a su cigarrillo. — No. ¿Por qué? ¿Te gusta?

— No amigo, nada que ver. Pasa que son como culo y calzón ustedes.

Matias se rió y se levantó para asomarse por el borde del balcón. Blas hizo lo mismo y le dió un codazo suave, esperando que confesara.

— Es linda y todo pero somos amigos, nos conocimos hace un par de meses recién.

El pelinegro asintió, aún no creyéndole nada y se dirigió a la puerta de la habitación para salir de esta y encontrarse con Cher detrás de esta, dudosa de entrar. Al verla le sonrió y la saludó, ella le devolvió el gesto y se secó las manos sudadas en su pantalón antes de ingresar.

Matias se percató de su presencia gracias al sonido de los borcegos que siempre solía usar y se giró para verla. Ella le sonrió apenas y fue directo a acostarse a su cama para usar el celular, faltaban un par de horas para que se armara la joda en lo de Juani y Kuku así que iba a descansar un rato.

Al chico no le pareció raro que pasara de largo, pero pronto tuvo sospechas que se trataba del beso.