Multiplicación

1.5K 186 25
                                    

—Creí que le estaba dando el Miraculous a Adrien Agreste —Ladybug expresó.

Nuevamente, estábamos reunidos en nuestro lugar común para poder seguir con nuestra búsqueda por Félix y poder recuperar todos los Miraculous que ahora Monarch poseía.

—¿Saben de quién hablo? —ella preguntó.

—Un poco —respondió Chat.

—Lo he visto un par de veces... —dije.

Lo chistoso era que detrás de nosotros ha Ian miles de anuncios con la cara de mi novio en ellos.

—Por error le di el Miraculous a su primo, Félix —dijo la de rojo—. Se parecen tanto que se hace pasar por Adrien.

Yo bufé, aún me sentía algo tonta por haber confiando en Félix y él terminó traicionándonos.

—Lo único bueno de esto, es que sabemos que ambos están conectados, de alguna manera Félix tuvo que haber contactado a Monarch para darle los Miraculous —mencioné.

—Bueno, hay que encontrar a Félix —Ladybug expresó.

Estábamos por usar nuestros poderes espaciales para poder levantarnos en vuelo pero cierto Maestro nos detuvo.

—Ladybug, tú debías proteger los Miraculous, fallaste en tu deber como Guardiana —la señaló.

—Pero sí estaba protegiendo los Miraculous —ella trató de defenderse.

—¿Y entonces cómo explicas que Monarch los tiene todos ahora? —el mayor preguntó.

—A ver —di un paso hacia el frente—. Maestro Su-Han, Ladybug estuvo cuidando los Miraculous todo este tiempo, y usted solo se fue y nos dejó sin siquiera mostrarnos su apoyo —mencionó.

—Pero- —lo interrumpí.

—Un error lo pudo haber cometido cualquiera, incluso usted, así que si nada más viene a reclamarle a Ladybug el por qué no cuidó los Miraculous, creo que la verdadera pregunta sería, ¿por qué usted no le brindó su apoyo a la Guardiana?

Pronto el mayor cayó de rodillas.

—¡Tienen razón!

Puse cara de confusión y miré a Chat quien solo se encogió de hombros igual de confundido que yo.

—Debí ayudarlos, pero me deje distraer por el mundo moderno —dijo—, con estos zapatos, y este aparato electrónico con videos de gatitos que se llevó cuatro meses de mi vida.

—Soy más fuerte que ustedes, y más experimentado, no debí caer en esas tentaciones —empezó a lamentarse.

—Sí, sí, ya a ver, arriba, Maestro Su-Han —lo tomé del brazo para levantarlo.

—Mejor piensa en cómo ayudarnos, eso estaría muy cool —Ladybug dijo.

Él asintió. —Volveré al templo para buscar refuerzos —dijo y comenzó a saltar de tejado en tejado alejándose.

—Y... Estamos como al principio —Chat murmuró.

Yo bufé. —Pues más ayuda el que no estorba —huce una mueca y miré a mi equipo.

—Bien, sigamos con lo de Félix, el chico vive en Londres, así que pónganse sus trajes espaciales y vayamos a tierras británicas —expresé.

Comimos nuestro respectivo bocadillo con aquella pócima para que nuestros trajes espaciales aparecieran y emprendimos un viaje hacia Londres, que, bajo otras circunstancias, estaría muy emocionada de visitar.

Unidos Para Siempre (Chat Noir/Adrien y Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora