For the hope of it all

PADAM PADAM | Parte 1

FLASHBACK

Solo llevamos unos días dentro de la academia y la primera semana ya está siendo alucinante.

Cuando supe que me había tocado cantar con Paul el tema "El encuentro" de Amaia no pude contener la emoción. Pero, a medida que avanzaban las clases y los ensayos, se instala en mí un punto de inseguridad. Siento que algo no funciona.

Mis sospechas se confirman cuando nos toca la clase de interpretación con Abril.

"Liadas, hay muchas liadas Paul" le regaño en tono suave, pero preocupada porque ahora no solo es que nos faltara la interpretación, sino que también la habíamos ejecutado mal vocalmente.

"Venga chicos, fuera de esta clase ya" bromea Abril para quitarle hierro al asunto "A ver, hay cosas que están muy bien...lo que son los ojos, hay una buena instalación, pero también había una falsa intensidad" nos valora la actriz, y yo sé perfectamente a lo que se refiere.

Pese a que me cae bien Paul, siento que no hay esa chispa especial entre nosotros, esa química que se necesita para conectar en una canción.

Trato de no dejar que esta situación me afecte a la hora de ensayar, pero no puedo evitar sentirme desanimada por no alcanzar mi nivel de autoexigencia. Tanto es así, que me escapo durante las horas de ensayo a estar con el resto de los compañeros, y con la persona que más calma y confianza me transmite en este lugar: Violeta.

Llego a la terraza y está con Salma sentada con unos libros y rotuladores. Corro para sentarme al lado de Salma al ver lo que tienen entre las manos.

"¡¡¡¡¡Hala, tienes pinturas!!!!!" le digo emocionada porque cualquier novedad requiere una celebración en esta academia en la que estamos completamente desconectados de todo.

"Escúchame, esto es como medicina ¿me entiendes o no?" me espeta Salma y por el tono que está utilizando veo que la estoy sacando de quicio "parad de tratar-

Y, a pesar de que sé que la estoy llevando al límite, la interrumpo porque he visto como Violeta sonreía ante mi entusiasmo.

"Esta para mañana" digo cogiendo un rotulador y haciendo un gesto como que me lo voy a comer, ya que ha hecho referencia a que es medicina.

"Chiara, dámelo" dice Salma quitándomelo de la mano.

La pelirroja sonríe de oreja a oreja y me suelta "Chiara, te amo, vente aquí a mi lao" y todas las preocupaciones que había estado rumiando respecto a mi canción de la semana desaparecen.

"Ven, siéntate aquí a mi vera" me dice y yo, como un resorte, me levanto obedeciendo a sus órdenes.

"¿Cómo que para mañana?" pregunta Salma confunsa sin entender la broma que he hecho.

"Como la pastilla, como has dicho que es medicina" le explico a Salma "esta para la mañana, esta para la comida y esta para la cena" añado gestualizando como si me estuviera llevando una pastilla invisible a la boca.

"Es muy cuqui tio..." oigo decir a Violeta más para sí misma que para nosotras, y yo siento como si abrazaran a mi niña interior.

El resto de la tarde la pasamos pintando un mandala a medias. La cercanía de Violeta añade un matiz especial al momento, un halo de alegría a la habitación; a veces me encuentro distraída por su belleza y, a pesar de ser consciente de que nuestros sentimientos no son mutuos, no puedo evitar emocionarme cada vez que compartimos un momento juntas o cuando ella es la única que comprende mis bromas. Es como si su complicidad llenara un vacío que ni siquiera sabía que existía.

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Ya en las habitaciones, estoy en la cama sentada con Violeta y Salma. Aunque esta tarde me he distraído un poco, la preocupación me invade de nuevo.

"¿Qué te pasa Kiki?" nota Salma que me conoce más de lo que muchos de esta academia piensan.

"Creo que nos van a nominar" les confieso mirando alrededor para ver si hay alguien más cerca.

"¿Qué dices Kiki? Si lo hacéis genial" me contradice la granaína frunciendo el ceño.

"De verdad, yo no siento conexión al cantarla y Abril nos ha dicho hoy que era como impostado. Encima no es algo que pueda arreglar fácilmente" digo apesadumbrada.

"A no ser que mañana te levantes y seas heterosexual" bromea Salma, a lo que ni Violeta ni yo reímos. De hecho, esta última, la fulmina con la mirada.

"Mira Kiki, cuando habéis ensayado antes quizás tú no te hayas sentido conectada con Paul, pero yo he sentido cosas" nos dice a las dos en voz baja.

"¿Cosas?" le pregunto aún más confundida que antes.

"Si Kiki, cosas. Ahí abajo, en la almeja" me aclara Salma perdiendo la paciencia de nuevo.

"¡Salma!" la regaña Violeta y yo aún sigo sin entender lo que me quieren decir.

"Pero no es como Denna y tú. Es que os veía esta tarde y de verdad sentía vuestra química. Me quedaba embobada" admito sonrojándome porque no es solo eso lo que he sentido cuando las he visto, pero ahora mismo no es de lo que estamos hablando.

Violeta se queda pensativa como intentando buscar las palabras adecuadas, hasta que me dice lo siguiente.

"Entiendo cómo te sientes Chiara" me dice mientras me da un apretón en el brazo "sé que te cuesta abrirte con la gente y que solo lo haces cuando te sientes cómoda, pero ya verás que, en lo que respecta a la música; vas a encontrar la forma de hacerlo. Para eso estamos aquí. Para aprender. Pero no quiero que dudes ni un segundo de lo que vales. De verdad, es genial como os queda esa canción" me quedo sin palabras alucinada al ver que ha leído completamente como me siento sin yo decirle nada.

"A dormir ya hombre!!!" dice Cris en alto para todos, porque algunos seguimos cuchicheando.

Me preparo para levantarme de la cama y volver a la mía cuando Violeta me detiene con esas palabras tan simples pero cargadas de cariño "quédate, duerme aquí hoy" su voz suena cálida y llena de preocupación genuina.

"Sí" dice de forma somnolienta Salma "además no parece que Denna vaya a volver a su cama hoy" añade mirando hacia la cama de Alex.

La idea de compartir esta noche con ella, de tener su compañía, es exactamente lo que necesito en este momento. Me siento tentada a aceptar su invitación de inmediato, pero mi mente lucha con la idea de ser una molestia.