Pasaron unas semanas, carlos se había ido a vivir a otro barrio, porque boca le habia dado una casa, hoy era 9 de diciembre, era mi cumpleaños, como dije antes, no me entusiasma mucho esa idea pero no importa. Hoy iban a venir carlos, camila y danilo.
—Hija —susurro mi mamá sacandome la almohada que tenia tapandome la cara porque me había abierto la cortina y me daba el sol en la cara.
—No estoy —dije tapandome con las frazadas.
—Dale gordita es tu dia hoy.
Resongue y me sente en la cama toda despeinada.
—Tenes visitas —dijo ella. PARAA Recien me despierto, recién me estoy rescatando que existo, paaraaa.
—Buen diaa —dijo danilo entrando a mi pieza. Bueno, ahi no me molesta la visita tan temprano. Lo salude con la mano y el se sento a mi lado. —Feliz cumple bri —me dio un beso en la mejilla.
—Gracias uru. —Sonreí.
—Mira. —Dijo el sacando algo de su bolsillo. —Te acordás que el otro dia me dijiste que te gustaria compartir una pulserita? bueno aca esta. —Me mostro dos pulseritas, una blanca y otra negra, ambas tenian una pelotita de futbol en el medio.
—Que linndaas —sonreí con ternura y agarre una. —Gracias uru.
—¿Te gustan? mira que la podemos cambiar si queres.
—Me encantan boludo.
—Si?
—Sii, a ver mostrame tu muñeca que te pongo una. —me mostró su muñeca y le puse la pulserita blanca, el hizo lo mismo con la mia.
—Re linda te queda —le dije.
—A vos también.
Me rescate que mi vieja estaba sentada en la punta de la cama mirandonos con una sonrisa como si estuviera viendo su novela favorita.
—Ay maa —le dije riendome.
—Que hice.
—Nada nada.
—Bueno, preparate para la noche.
—Las 11 de la mañana son ma, falta todavia.
—Bueno nose, preparate para irte a vaguear un rato que se yo. —dijo riendo y se fue.
Tire devuelta mi cabeza para atrás quedando nuevamente acostada.
—Tengo sueño —dije.
—Me di cuenta. Vamos, vamos a dar una vuelta por ahi.
—Uuhhh —dije renegando.
—Dale pareces una vieja —me dijo el.
Yo no dije nada, me levante y me cambie, me puse un short de jean y un top negro para que quede cheto con mi pulserita. Ya venian haciendo altos dias de calor, que bronca. Me mire al espejo y me termine de acomodar el pelo.
—Estas re linda morocha. —me dijo danilo.
—Te dije que no soy morochaa, soy castaña —rodee los ojos.
—Buee, castaña, estas re linda.
—Graciaas —sonreí.
***
Habiamos estado casi todo el dia paseando por ahi y cuando volvimos a casa estaba todo decorado.
—Fuaa —dije mirando.
—Te gusta? —me dijo mamá.
—Si, ta cheto. Gracia' vieja.
—De nada mi amor —me dijo ella dandome un beso en la frente.
Después de un rato llegaron mis amiguitos, cami y carlos, estuvimos ahi un rato, Carlos y camila se comian con la mirada literal, dios mio, estos chicos.
—Eh pa' las fiestas que van a hacer? —me dijo carlos.
—Ni idea.
—Vamo' a pasarla juntos, mis familia, tus papás, vos y el danilo.
—Eh? ¿si? —dije yo.
—Me re pinta a mi eh —dijo danilo.
—Si después pregunto —dije yo —pero vo' tene' el permiso ya? —le dije a Carlos.
—Fue de mis papás la idea.
—Ahh, flama, yo mañana les digo a los mios entonces.
